El partido en el poder sigue aferrado en adelantarse a los tiempos, y es que antes que concluyera el mes de julio, Morena difundió un proyecto para la desaparición de organismos autónomos como el INAI, la COFECE, la CRE, la CNH, IFT y Coneval, y que sus funciones pasen a las secretarías de Estado para evitar duplicidades.
Y llama mucho la atención la consigna que tienen los legisladores de Morena y la premura y completa aceleración que intentan hacer, cuando saben perfectamente que, con la extinción de los seis órganos autónomos que quieren eliminar, ocasionaría múltiples implicaciones negativas en diversos aspectos de la gobernabilidad y los derechos ciudadanos en el país.
Este gobierno repite y repite que, con esta eliminación, se ahorrarán recursos, pero lo que omite es decir que los mexicanos perderán sus derechos a ser informados y no sabrán en cómo se gastarán o en qué ocuparán dicho recurso “ahorrado”.
Ya que, al no existir transparencia, ningún ciudadano podrá acceder a la información de obras o gastos que hace este gobierno y el que viene; todo tipo de investigaciones, como el de sus obras faraónicas, serán difíciles y digamos que imposibles de acceder.
Morena se muestra muy ansioso de que llegue la opacidad, que todo lo que hicieron en estos seis años quede completamente sepultado y protegido por el Estado; es por ello que desde el día uno buscó la manera de debilitar y desacreditar a los organismos autónomos.
Y si recordamos, el presidente de la República se ensañó con el INAI, al que dio a entender en repetidas ocasiones que pensaba desmantelar; por eso el retraso de los nombramientos de comisionados, las reducciones presupuestarias y los embates.
Pero no solo fue el INAI y el IFT; eso solo fue la antesala de lo que en verdad quería; él iba por la extinción de todos, a sabiendas que su deseo de borrarlos generará una completa desconfianza en el gobierno que está por acabar y en el que pronto comenzará.
Porque la eliminación de estos organismos podría percibirse como un movimiento para centralizar el poder y reducir la supervisión independiente, la falta de organismos especializados podría reducir la eficiencia en la implementación de políticas públicas y la regulación de sectores clave, afectando el desarrollo económico y social del país, pero a la 4T parece no importarle nada de eso.
Es por ello que, con saña y al parecer mucha perversidad, armaron una estrategia para debilitar cada organismo, y más aquellos que son controles y contrapesos democráticos: todo eso en una apuesta clara por ir concentrando el poder en una sola persona, en el Ejecutivo federal.
Por eso tantos ataques desde la palestra matutina, las constantes descalificaciones al trabajo de cada institución, deslegitimando su labor y restándoles importancia, pero, pese a su perversa estrategia, omitieron explicar qué harán con el dinero público, porque nada nos asegura que el dinero “ahorrado” se va a gastar mejor y en cosas de mayor beneficio para los mexicanos.
*Senador por Veracruz. PAN