Los escotes en la espalda, muy femeninos, continuarán en tendencia durante la próxima temporada primavera-verano, en la cual los colores que resaltarán serán el amarillo, naranja, los azules, los magentas y el verde en todas sus tonalidades, así como el rojo que no pasa de moda y está siempre vigente en los diseños para lucir radiantes durante los próximos días cálidos del año, enfatizó la diseñadora de moda veracruzana Suheil Cabrera.
Los tonos pastel como el rosa, entre otros muy suaves también habrán de destacar la figura tanto femenina como la masculina con diseños minimalistas, simples y planos, añadió.
Las transparencias, tanto en vestidos de novia y coctel, como casuales, tampoco pasan de moda, por lo que durante los días soleados y noches calurosas los veremos con frecuencia.
La maestra, quien dirige una escuela de alta costura en esta ciudad, y se ha destacado por el diseño de vestidos de noche y novia, adelantó que los modelos vuelven a tener mangas amplias, abullonadas, sueltas, con muchos volados, escarolas y muy ligeros, asimismo conservarán las transparencias, encajes y los escotes muy femeninos en la espalda. Su página es www.corporativosuheilcabrera.com.mx
Para quienes no les gusta la ropa ajustada, vienen modelos planos, de siluetas simples, lo importante es que se toma en cuenta el tipo de cuerpo de cada una de las personas tiene para sugerirle telas vaporosas, como seda o chiffón o por el contrario, si se requiere estructura utilizar telas rígidas.
En cuanto a los pantalones se mantendrá la tendencia de los de tiro alto, así como el corte recto o acampanado, que alargan y estilizan la figura, pero también regresan los que se ajustan a la cadera, asentó.
El complemento perfecto para los vestidos de noche será la sandalia descubierta, pues se presenta una buena temporada para desnudar el pie.
Aconsejó jugar con los colores, pero tener siempre a la mano sandalias en tonos neutros, nude, o color maquillaje, así como color negro que nunca pasa de moda, sin embargo no es un color que se utilice mucho en la primavera, a menos que sean para acompañar un buen traje sastre, para lo cual se requiere el zapato stiletto de piel o charol.