Un impresionante e inigualable tesoro arqueológico destaca en la región huasteca de Veracruz con una imponente estructura que maravilla a todos los pobladores y turistas que se han dado la tarea de visitarla.
Se trata de Castillo de Teayo, un precioso rinconcito de la entidad veracruzana ubicado a una distancia de 372 kilómetros de Córdoba, en las cercanías de Álamo, Tihuatlán y Poza Rica que resguarda un importante legado de las antiguas civilizaciones con un monumento piramidal.
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Considerado como un sitio de visita y exploración obligado, Castillo de Teayo se mantiene como un atractivo promovido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), organismo que comparte más detalles sobre esta maravilla, ¿lo conoces?
¿Cuál es la importancia del Castillo de Teayo?
El INAH expone que esta estructura se encuentra localizada sobre la parte central de la población del mismo nombre y resalta la estructura piramidal con “tres cuerpos que rematan en una plataforma superior sobre la que se construyó un templo”.
Del vocablo huasteco “teayo”, (en la tortuga de piedra), la estructura cuenta con una altura de 11.3 metros en la que se puede observar su bella escalinata que conduce al ya mencionado templo.
La imponente pirámide cuenta con estilos arquitectónicos de las culturas mexicas y huastecas, además de tener influencias toltecas y mayas, sin embargo, resaltan su origen del periodo preclásico temprano.
El sitio es uno de los más destacados con los que cuenta el estado de Veracruz debido a que se trata de una estructura, como se mencionó, ubicada en la parte central de la población, considerada como una de las pocas construcciones de este tipo que aún se conservan “en el área mesoamericana”.
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En los alrededores del Castillo de Teayo es posible encontrar pequeñas bancas desde donde puedes detenerte a observar con detalle la gran construcción, sin embargo, la calle principal de Porfirio Díaz, junto con las intersecciones de Morelos, Tuxpan y Huauchinango son ideales para poder tener distintos ángulos de esta maravilla al alcance de la población.
La experiencia no queda ahí, ya que junto al palacio municipal y el zócalo es posible encontrar el ‘Museo de Sitio Castillo de Teayo’, espacio que cuenta con una serie de objetos prehispánicos de esta pirámide y la región norte del estado.
Desde figuras humanas y animales hasta “representaciones de deidades” son solo algunas de las piezas que podrás hallar durante los recorridos en los que también se comparte información sobre los orígenes e información sobre los antiguos pobladores.
Para llegar desde la ciudad de Córdoba y Orizaba se estima un viaje de 4 horas con 30 minutos, teniendo como principal entrada la zona de Tihuatlán. Llegando aquí se toma la carretera Tihuatlán-Castillo de Teayo, la cual te direccionará de forma directa.
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