De boxeador a panadero, va la historia de "El Jarochito" Illescas

Desde pequeño aprendió el oficio de panadero, su padre Margarito Illescas Acosta se lo heredó

Adriana Luna / El Sol de Córdoba

  · martes 20 de febrero de 2024

Fue campeón de la Copa México en el 89-90, llegó a pelear en Estados Unidos de manera ilegal porque no tenía Visa | Cortesía / Eliseo Illescas

Córdoba, Ver.- Nacido un 2 de octubre de 1968 en el barrio bravo de la México, en Córdoba, Eliseo Illescas Gómez relata parte de su vida, por casi una década se dedicó al boxeo profesional viajando por varias partes del mundo, pero por amor a su familia se estableció en Córdoba en donde cumplirá ya 25 años en el oficio de la panadería.

Cuándo inició la historia de Eliseo Illescas en el boxeo

En el mundo de boxeo fue conocido como "El jarochito Illescas", a los 17 años inicio como boxeador, hasta los 26 años más o menos. En ese lapso fue campeón de la Copa México en el 89-90, incluso paso de "mojado" para pelear en las Vegas en ese entonces no tenía documentos.

Es el sexto de diez hermanos, y desde pequeño aprendió el oficio de panadero por su padre. Relata que peleó en las Vegas, Tijuana, Texas, Denver Colorado y otros estados del país; fue sparring de varios campeones del mundo como "El Bulldog" además "Del Gallito Quirino" La Cobra Soto", sin embargo, por amor a su familia decidió quedarse en México.

Casado desde hace 30 años tiene tres hijos, dos varones y una mujer, uno de ellos le siguió los pasos en el boxeo, pero sólo como deporte.

De los cuadriláteros a los horno de pan

Desde pequeño aprendió el oficio de panadero su padre Margarito Illescas Acosta se lo heredó, de ahí ha dado techo, casa y comida a su familia y a más de 20 personas que laboran en su pequeño local ubicado en la colonia México.

Ha dejado atrás el boxeo, pero indica que aplica algunas reglas de este deporte en su negocio, como la disciplina y la inteligencia pues quién no lo hace no crece, no trasciende.

Es conocido por la labor social que realiza en la comunidad a la que pertenece, ayuda a los que menos tienen, el activismo social que realiza hace que lo conozcan en varios ámbitos, pero no por ello pierde el piso, indica.

Para Eliseo es importante la familia pues al ser disfuncional los niños y jóvenes enfrentan una serie de problemas y de ahí se generan otros más.

Es el sexto de diez hermanos, y desde pequeño aprendió el oficio de panadero por su padre | Cortesía / Eliseo Illescas

Su pasión por el boxeo sigue y seguirá, pero dice que es mejor estar pendiente de su panadería en donde se refugia todos los días a lado de sus trabajadores pues es el oficio que ama y que le da la paz y la tranquilidad que necesita.

Atrás dejó el boxeo que practica ahora como aficionado y solamente le quedan los recuerdos de aquellos viajes y peleas sobre todo en las Vegas en donde llegó sin documentos y de manera ilegal aunque después regresó con visa y triunfó, pero él eligió ser panadero al lado de su familia.

Es hijo de Margarito Illescas Acosta y Angelina Gómez, quienes ya descansan en paz pero que le dejan un legado de amor y trabajo que es lo que quiere transmitir a sus tres hijos, para ellos trabaja arduamente y espera ser un ejemplo para ellos.