Orizaba, Ver.- Desde pulseras, diademas, bolsas de mano, collares y aretes, Erika Rosas Flores, empezó a realizar estás manualidades, siendo por ahora la única en su familia que se dedica a la realización de estos accesorios que son fuera de lo normal, pero que combinados llegan a ser un elemento importante para un outfit moderno y casual.
Desde hace 15 años empezó a realizar la joyería con palma; afirma que cuando fue temporada de palma en Semana Santa, fue que se le ocurrió la idea y en su mente ideó muchas propuestas, entre ellas como pintar la palma sin cortarse, y aunque esté tipo de incidentes aún le ocurren, este emprendimiento le ha abierto muchas puertas en exposiciones.
- Puedes leer también: Tecnología está desplazando a los relojeros, la historia del artesano Erasto Sarmiento
"La adquirí y la compré, ahí empecé a cortarla, para hacer las pulseras, collares y aretes y trabajo el listón y ahí tomé para hacer las hojas y las flores, todo fue autodidacta", comenta.
¿Cómo inició la elaboración de joyería de palma?
Dentro de su mercancía de joyería en palma, hace uso del grano de café, el cual taladra por en medio para poder introducir un hilo y así hacer la pulsera, collares y flores.
Cuestionada sobre cuanto tiempo tarda en hacer los collares y pulseras que realiza, explica que va de 3 a 4 días de trabajo, toda vez que con el calor debe pintar más rápido la palma y la hoja de maíz.
Señala que cada uno de los pétalos de hoja de palma que corta, los hace a mano en forma de rombo, seca la flor que va en medio y posteriormente las pinta; en cuanto a las diademas que llevan flores, tarda alrededor de 20 días en hacerlas, pues forra la diadema de listón y posteriormente hace el corte de las hojas de palma, la cuales llegan a medir alrededor de un centímetro.
"La flor de palma la hago una por una y lleva su tiempo en pintarlas, uso la pintura textil o la de pasteles que se adhiere a la hoja".
Su innovación para emprender, ha llegado a hacer bolsas de manteles, los cuales se usan para comer, sin embargo, ella va más allá, "la gente ya casi no compra las artesanías y hacemos el esfuerzo para que se venda".
Afirma que en su familia es la primera que hace la joyería con palma, y ahora sus hijos y su sobrina le apoyan para que el trabajo salga más rápido.