Cuántas veces no nos hemos enterado de anécdotas donde los padres dejan olvidados a los hijos sin querer en el auto, en la escuela o en el supermercado como le sucedió a una mujer que abandonó a su hijo por descuido y éste grabó cómo fue su experiencia mientras la esperaba.
En el video que subió a su cuenta de TikTok, el joven explica que acababa de hacer el súper con su mamá cuando ella se dirigió al baño, mientras él aprovechaba para comprarse un helado. Roland cuenta que estuvo esperando a su mamá por más de una hora y ya preocupado fue que decidió marcarle a su celular para saber qué pasaba.
“Rol, perdóname. Ya voy por ti” fue lo que le contestó la distraída mamá, quien se había ido en el carro hacia su casa sin darse cuenta que había dejado a su hijo esperándola.
En el tiktok narra la llamada que tuvo con su mamá y expone que ella no se dio cuenta de que lo había olvidado hasta que se le antojó un refresco y al abrir el refrigerador no había, puesto que las bolsas del súper se encontraban con Roland. Fue cuando cayó en cuenta de que había olvidado algo en el supermercado: su hijo.
Síguenos a través de Google News
El video creció su número de vistas a las pocas horas pues a las personas les causó gracia este incidente y crearon empatía con el joven al ser abandono por descuido.
Al final del video se puede apreciar la reacción de la mamá, quien algo avergonzada le pide perdón a su hijo y le explica que fue la costumbre, lo que da a entender que tal vez no acostumbran hacer el supermercado juntos y por eso se le hizo fácil irse directo a la casa.
¿Por qué se olvidan los hijos?
El caso de Roland se popularizó en redes sociales debido a la cantidad de personas que se sintieron identificados pues es una situación que pasa con regularidad. Una de las razones que provoca este tipo de incidentes se debe a un cambio de rutina en la persona, esto provoca que falle la memoria o que la mente no integre tan fácil nuevas tareas.
Un trayecto diferente al habitual o una situación que rompa con la monotonía puede provocar olvidar hacer algo, incluso recoger a tu hijo del supermercado como sucedió con la mamá de Roland.
Publicado originalmente en El Occidental