La piratería en artículos de electricidad genera pérdidas de poco más de 50 mil millones de pesos anuales a los hogares mexicanos, además de propiciar incendios por cortocircuitos que provocan 500 muertes al año, informó la Confederación Nacional de Asociaciones de Comerciantes de Material y Equipo Eléctrico (Conacomee), presidida por Jorge Franco González.
Los artículos más pirateados son contactos, enchufes, cables de diferentes calados que en lugar de cobre les ponen aluminio, chalupas, focos, extensiones y apagadores, de acuerdo con datos facilitados por la oficina que le maneja la comunicación a la agrupación.
Los lugares donde se más se venden esas mercancías son las áreas adyacentes de algunas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo (Metro) de la Ciudad de México, así como tlapalerías, tianguis y entre vendedores ambulantes, sobre todo del Estado de México, Guadalajara, Puebla, Monterrey, Pachuca y Cuernavaca.
Por otra parte, a propósito de la próxima Expo Eléctrica, Solar y la Feria de la Automatización, que preside Mauro Meliti, el robo de energía eléctrica en el país (con diversos métodos que incluyen los llamados “diablitos”), provoca pérdidas superiores a los 40 mil millones de pesos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
"El 92% de la energía eléctrica sustraída ilegalmente del sistema nacional de distribución se concentra en apenas ocho entidades. El 8% restante se reparte entre 24 estados", señala la Canacomee, la cual subraya que la CFE pierde al año el triple de lo que ingresa por el concepto de alumbrado público. "Mientras las pérdidas se calculan en más de 40 mil millones de pesos al año, lo facturado por alumbrado fue de 10 mil 597 millones en 2017".