Britney Spears solicitó este miércoles poner fin a la tutela legal por la que su padre controla su vida desde hace 13 años, una figura legal que calificó de "abusiva y absurda" y señaló que lo único que quiere es "recuperar su vida".
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La cantante aseguró ante un juzgado de Los Ángeles durante una intervención telefónica que "esta tutela está pagando el sueldo de mucha gente".
"Estoy harta, no soy feliz, no puedo dormir y me sentí drogada", fueron algunas de las contundentes declaraciones que la cantante le hizo al tribunal.
Se trata de la primera vez que Spears se opone públicamente al control que su padre ejerce sobre todos los aspectos públicos y privados de su vida por una decisión judicial que se remonta al año 2008 tras una etapa de comportamiento errático.
"No tiene sentido que una persona bajo una tutela legal gane dinero", señaló la artista, quien, mientras seguía bajo la supervisión legal continua, protagonizó un espectáculo en Las Vegas que generó millones de dólares en entradas.
Spears expresó en varias ocasiones su voluntad de terminar con la tutela y se negó a volver a ser evaluada por "desconocidos".
Sin embargo, su abogado, Samuel Ingham, no formalizó esa petición ante el tribunal y las dos partes volverán a reunirse en una fecha aún por fijar.
"Basta ya"
En el resto de su intervención, Spears definió su vida durante estos 13 años como un secuestro en el que no tiene libertad para hablar con la prensa, dar entrevistas, casarse o formar una familia.
"Quiero mi vida de nuevo, basta ya. Tengo un DIU (dispositivo intrauterino) en mi cuerpo en este momento que no me deja tener un bebé, y mis tutores no me dejan ir al médico para que me lo saque", imploró la estrella.
La artista confesó que en su última declaración ante la justicia, en 2019, no se sintió escuchada y pensó entonces que "nadie la creería" y que se reirían de ella.
"Me gustaría demandar a mi familia y compartir mi historia con el mundo", finalizó.
Su abogado aseguró que el testimonio de su clienta no fue editado, filtrado ni controlado. Lo que la corte escuchó fue a Britney en estado puro, una mujer que estuvo en la cima de la industria musical y que fue silenciada.
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Por su parte, el equipo legal de su padre, Jamie Spears, se negó a responder al testimonio de Spears para "preservar su privacidad" y no sacar a la luz "detalles de su estado de salud" en una audiencia pública y con presencia de periodistas.
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