Dice Martín Coronel que está muy orgulloso de que su padre el pintor y escultor zacatecano Pedro Coronel regrese al Palacio de Bellas Artes, su casa. Ahí recibió premios, realizó mega exposiciones y rindió homenajes a colegas.
“Su última exposición fue en 1981 y es despedido aquí en el vestíbulo cuando muere en 1985. La gente del pueblo vino a darle el último adiós”, recuerda.
Ahora se reúnen 43 de sus obras en la exposición Pedro Coronel. 100 años, una ruta infinita.
“La pasión de mi padre era el arte, pero más que poseerlo era amarlo, poderlo tocar. Por eso le gustaba comprar obra de otros artistas, porque lo importante para él era sentir el arte todos los días, estar cerca de él a través de grandes maestros que nos han hecho sentir que lo que perdura en el hombre es la cultura, porque nos acerca como humanos con un lenguaje universal que es el arte”.
Martín Coronel fue el encargado, junto con Iñaki Herranz de la curaduría de la muestra que se presenta a partir de hoy en el Museo del Palacio de Bellas Artes.
“Esta exposición con motivo de su natalicio para mi es el regreso a su hogar y estamos festejando sus 100 años. En 1993 hice una monografía de mi padre dejando oficialmente asentado que él nació en 1921, de acuerdo a testimonios de mi madre, mis tíos y tías. Y mi tía me dio la fe de bautizo de mi padre con la fecha correcta 25 de marzo de 1921 y en fecha reciente se pudo constatar en los libros de la Catedral de Zacatecas, que efectivamente está registrado el nombre de mi padre, Pedro Encarnación Coronel. Por eso estamos festejando sus cien años aquí en su casa”, detalla.
En el recorrido guiado, Iñaki Herranz explicó que “la muestra da fe de su profunda exploración plástica que se decantó, relativamente pronto, por un lenguaje cada vez menos figurativo, producto de un ir y venir entre la figuración y la abstracción, hasta conseguir una síntesis abstracta radical con un estilo inconfundible”.
“En cada cuatro se aprecian las temáticas que atañen a la condición humana y que son universales. El maestro plasmó en su obra el nacimiento, la muerte, la violencia, la maternidad, la identidad de nuestros ancestros, que es un común en todas las culturas”, añadió Herranz.
La muestra proviene de 29 colecciones como la del Museo Francisco Goitia, Museo El Universo de Pedro Coronel, acervos del Gobierno de Zacatecas y del INBAL. Colecciones López Velarde y Pérez Simón, más obras de la familia Coronel y colecciones particulares, añadió el curador.
Miguel Hernández Félix, director del Museo del Palacio de Bellas Artes, reiteró que Coronel regresa a su casa. “Es un artista grandioso, curioso e inabarcable, por la cantidad de facetas que tenía y se decidió que lo mostráramos como artista, porque también existe el Coronel filántropo”.
“Coronel con su obra creó arquetipos universales con un estilo sumamente elocuente en la abstracción con cuadros maravillosos seleccionados por Martín e Iñaki que van a hacer un gran atractivo para los visitantes al museo”, expresó Hernández Félix.
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Esta exposición que celebra el centenario de su nacimiento, divide las 43 obras en cuatro salas.
Abre con pinturas del Periodo de formación (1939-1946) y Obra temprana (1946-1958); Figuración abstracta (1958-1969 y 1975-1985), Abstracción total (1961-1985), la cuarta y última Coronel y los críticos.
“Como decía mi padre: mejor que las palabras, en el Arte y la Cultura, es disfrutar la obra y amarla. De esta manera invitamos a que no dejen de recorrer esta exposición en el centenario del nacimiento de quien en vida se llamó Pedro Encarnación.
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