Córdoba, Ver.- El 19 de septiembre del 2017 Daniel DaSilva Martins, de origen brasileño pero residente mexicano desde hace más de diez años, se encontraba en la Ciudad de México trabajando como traductor en un curso de micropigmentación, en el interior del edificio Álvaro Obregón, cuando sonó la alerta sísmica.
Relata que cuando inició el sismo, uno de los alumnos que tomaba el curso, alertó al resto del grupo que procedió a intentar abandonar el inmueble, pero no lo lograron. El edificio cayó encima de ellos en cuestión de segundos, relata a El Sol de Córdoba.
“Me acuerdo que, cuando el edifico empezó a moverse duro y colapsó tu no piensas en nada, unos segundos antes tu estabas corriendo y después estás atrapado en un hueco donde nada más cabes tu y ni siquiera puedes respirar al cien por ciento por que estas tan apachurrado por las piedras que tu respiración no es completa” relata.
En ese edificio, según cifras oficiales, 49 personas perdieron la vida y al rededor de 29 más lograron ser rescatados por grupos de emergencia de entre los escombros. Él fue uno de esos sobrevivientes, aunque hubo momentos en que pensó que no lo lograría.
“No piensas muchas cosas en un primer instante, nada más piensas en que sobreviviste, después empiezas a tener dudas: cómo está mi familia, cómo están mis amigos, será que la gente va a venir, será que voy a salir de aquí o me voy a morir, pues empiezas a sentir los dolores de las lesiones que tienes” continua contando y refiere que a raíz de eso tuvo fracturas en varias partes del cuerpo.
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Cuenta que conforme pasaban los minutos y empezaba a haber algo de calma en medio de escombros y polvo, también empezaba a escuchar a otros sobrevivientes con quienes empezó a hablar, sin siquiera verlos, voces que con el paso del tiempo van disminuyendo, lo que provoca una mayor desesperación, “porque sientes que tienes muy cerca de ti la muerte”.
Entre escombros, voces y desesperación ¡Por horas!
Y así estuvo, entre escombros, voces y desesperación por más de una hora, que fue el tiempo en que los grupos de rescate tardaron en localizarlo y sacarlo de entre los escombros para poder brindarle la atención médica necesaria y, principalmente, asegurar su vida.
A seis años de aquel día, Daniel, confirma que dicho sismo cambió su vida, cambiaron su perspectiva a la vida, priorizando realmente lo que es importante, por lo que ahora ha decidido aprovechar cada minuto de su día a día, ha aprendido a disfrutar de su familia y sus seres queridos, pues ese día, el obtuvo una segunda oportunidad.
Es de recordar que el 19 de septiembre de 2017 la Ciudad de México fue azotada por un fuerte sismo de 7.1 grados de magnitud con epicentro a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, Morelos, según el Servicio Sismológico Nacional, este sismo dejó un saldo de 369 muertos, la mayoría en la Ciudad de México donde 228 personas fallecieron, 49 de ellas en el edificio Álvaro Obregón 286 en la Alcaldía Cuauhtémoc.
