Córdoba, Ver.- A pesar de la situación mundial que se vive por el conflicto entre Rusia y Ucrania, la industria metal mecánica de Veracruz tuvo un año positivo, en comparación a otros sectores productivos del estado señala Juan Miguel Bueno Ross Director General de Manufacturera 3M.
“Fue un año de contrastes, porque de repente pitaba bien, de repente mal, pero al final de cuentas es un año que estamos cerrando bien, estamos vendiendo nuevas líneas de negocios diferentes, cosas novedosas, estamos trayendo otro tipos de trabajos que antes no se hacían en México”, comenta.
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Y es que destaca que esta situación de altibajos obligó a la industria manufacturera a tener que buscar nuevas líneas de negocios especializados de la industria eléctrica y minera que les ha permitido poder hacer frente a la crisis que se vislumbraba al inicio del año con la guerra Rusia - Ucrania.
¿Por qué el conflicto entre Rusia y Ucrania afecta la industria?
Pues ambas naciones son referentes internacionales para la industria del hierro y el acero, que tuvieron un incremento de hasta el cien por ciento en sus costos lo que también permitió que algunas naciones pudieran salir y ampliar su mercado cubriendo la demanda de aquellos países que dependían del acero de Rusia y Ucrania.
Punto en el que, dice, México quedó corto toda vez que no se hicieron las estrategias necesarias que permitieran al país poder potencializar a nivel mundial no solo su industria metal mecánica, sino otros sectores donde el país destaca.
“A México le faltó agarrar más oportunidad, lamentablemente no tenemos un gobierno que vea eso y pudo haber agarrado más trascendencia, se pudo haber poténcializado el trabajo en México, pudo haber más empleo para la gente, pero faltó la visión de poder participar a nivel mundial”, explica el empresario.
Quien adelanta que el 2023 podría mantenerse de manera similar al 2022, pues actualmente existen muchas expectativas en relación a la recesión financiera en el mercado de Estados Unidos y de ahí dependerán muchos factores económicos para el siguiente año.
No obstante, adelanta que se deben tomar las previsiones necesarias para que el impacto económico mundial no pegue directamente al mercado mexicano y no desestabilice la economía nacional.
