Córdoba, Ver.- Posiblemente exista un caso de Covid-19 entre la población diocesana de la ciudad de Córdoba, por lo que el sacerdote ya se encuentra en cuarentena, así lo dio a conocer el Obispo Eduardo Carmona Ortega en una breve rueda de prensa en el Salón Juan Pablo II con todas las medidas necesarias, en contraste, para las ceremonias eclesiásticas, los feligreses deberán acatar las reglas, se planea reducir el porcentaje de asistencias.
"Queremos ser respetuosos y cuidadosos de la salud de la gente entonces si vamos a tener cuidado, avanzar de acuerdo a los semáforos que se den en las regiones de la Diócesis, luego de que el viernes se dio a conocer que es 'rojo' nuevamente, entonces a partir de allí cada semana revisaremos que tenemos que hacer, si avanzamos lo hacemos, si nos quedamos se hace y echamos para atrás algo lo vamos a hacer".
Expresó que de ser necesario para continuar con las actividades de ceremonias, se permite la entrada del 25 por ciento de población con todas las medidas, quizá este porcentaje pueda ser reducido.
En otro contexto, sin dar más información al respecto, como nombre o municipio, dijo que dentro de la Diócesis hay un sacerdote en cuarentena, “en este caso la iglesia no se explica cómo paso por ello el templo sigue cerrado, existen medidas que a los pocos servicios que esta brinda se dan con la mayor de las seguridades sanitarias, siguen teniendo la eucarística a través de las redes sociales”.
Refirió que la Pastoral Vocacional continúan con sus actividades y ‘se las ingeniarán’ para dar las pláticas a los aspirantes. Por ahora no pueden decir cuántos seminaristas están por ingresar ya que apenas van a empezar a los llamados, “tendremos las medidas necesarias para cada una de las actividades que se requiera, la iglesia está más viva que nunca y nos sorprendemos como se hacen muchas cosas a través de los medios digitales y las redes sociales".
Luego de que el sábado por la mañana Patiño Leal dejará su lugar para darlo en su momento al que fue su coadjutor, Carmona Ortega asumió este día su nuevo nombramiento como el segundo Obispo de la Diócesis de Córdoba y agradeció de primera mano ese nombramiento dado por su Santidad el Papa Francisco.
Cuestionado sobre sus preocupaciones máximas dentro de la Diócesis y los civiles, ejemplifica como “las luces cortas y altas”, sus prioridades; vigilar el comportamiento de la pandemia sin parar actividades pastorales, la renovación del Plan Diocesano Pastoral y el Conocimiento total de la Diócesis, esto en el ámbito eclesiástico. Por su parte, en lo civil espera manejar junto con la sociedad la pandemia, aprender a ser solidarios, estar unidos y valorar la familia.
"La expectativa y el pedir a las autoridades que atiendan las circunstancias, todos tenemos que sumar a vencer. Los principales son las autoridades y les pedimos que le pongan ganas para que no nos venza y que nos haga más fuertes, generosos y que la nueva normalidad nos haga personas mejores".
Finalmente, hizo el llamado a la población a seguir con las medidas de sanidad, aseo y limpieza.