Córdoba, Ver.- Registra la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Córdoba (CEDH) una baja en las solicitudes de constancias para grupos de migrantes, no obstante, continúan laborando y atendiendo quejas vía telefónica; su labor más reciente, la verificación de posibles casos Covid-19 en el penal de mediana seguridad de Amatlán.
Manuel Antonio Sánchez Hernández, delegado regional de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, dijo que la atención a los migrantes con las constancias de grupos vulnerables ha ido bajando pues ahora con la pandemia mundial de Coronavirus puede existir miedo de viajar.
En este tema, llevan 15 solicitudes de estas constancias, pero en la comisión estatal, continúan con los asuntos jurídicos, de divorcios, maltrato familiar, laboral todos estos brindando únicamente el apoyo jurídico.
Sánchez Hernández, expresó que en este asunto, de las 100 atenciones mensuales que brindaban, desde abril a la fecha han de tener únicamente 50 atenciones.
Por otro lado, las notificaciones a Ayuntamientos son las únicas que se hacen de forma presencial, pues deben de llevarse a las instalaciones de los Palacios Municipales donde tienen una fecha límite para aceptar o no dichas recomendaciones.
Estas pueden variar en tema, pero en la zona el Municipio de Mariano Escobedo e Ixtaczoquitlán ya cuentan con estos documentos y tienen 15 días para aceptar o declinar esta notificación, no expresó cuáles serían las consecuencias.
Recientemente se informó que como Comisión Estatal de Derechos Humanos en Córdoba estarían atendiendo a las Personas Privadas de Libertad (PPL) en los centros penitenciarios de la región, al menos a la Comisión le compete el Cereso de Amatlán, pues existía el miedo en contagio de Covid-19. Este hecho ha quedado descartado por parte del delegado.
Fue el lunes de la semana pasada cuando la dirección de asuntos penitenciarios de la Comisión Estatal acudió por la mañana al penal de La Toma para dar seguimiento a una queja que inició de oficio en las oficinas centrales de la CEDH; ingresando con trajes de seguridad, guantes y caretas para no contagiar a los PPL.
