Cifras de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural señalan que México se encuentra ubicado entre los principales países productores de carne de ovino con una porción aproximada, hasta el 2021, de nueve millones de cabezas de ganado.
Entre los estados más sobresalientes dentro de esta producción se encuentra Hidalgo, Veracruz y Jalisco, siendo este último un referente con la creación de una raza que ha sobresalido entre las demás por sus impresionantes características.
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Se trata del borrego Pelifolk, especie que fue reconocida el 11 de diciembre del 2021 como la primera raza de ovino mexicano y que cuenta con particularidades que la convierten en un animal, descrito por ganaderos, “todo terreno”, ¿habías escuchado hablar sobre ella?
¿Cómo nació el borrego Pelifolk?
La importancia de esta raza y su influencia dentro de la ganadería generó la creación de la Asociación Mexicana de Criadores de Ovinos Pelifolk, quienes, además de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, comparten que esta especie surgió en el año 1991 gracias a una cruza entra otras razas como: Black Belly, Pelibuey y Suffolk.
Se considera que esta raza es originaria del estado de Jalisco, especialmente del municipio de Zapotlanejo. La Agroindustrial Tequilera García Otegui expone que fue el Médico Veterinario Zootecnista (MVZ), Benjamín Nuño uno de los principales impulsores de esta especie tras 20 años de investigación.
La mezcla entre razas africanas, inglesas y de Barbados dio como resultado un animal “con mayor musculatura, más producción de leche y una respuesta al pastoreo por su adaptabilidad a terrenos rústicos”.
Los productores señalan que el borrego Pelifolk ha representado un cambio para ganaderos o para quienes buscan incursionarse dentro de este mercado, pues la especie contempla varias ventajas.
¿Cuáles son algunas curiosidades del borrego Pelifolk y qué lo hace tan especial?
Entre algunas características que destacan sobre otras especies se encuentra su peso, pues los machos pueden alcanzar los 100 hasta los 150 kilogramos y de 60 hasta 75 kilos en hembras.
Cuentan con una fertilidad del 95%, un peso en el nacimiento desde los tres hasta los cinco kilogramos y su mantenimiento es de bajo costo.
Gracias a su pelaje, los borregos Pelifolk se adaptan con facilidad a diversos climas, además de poder enfrentar “condiciones adversas”.
Debido a su gran peso se puede obtener carne de gran calidad, lo que la convierte en una de las especies más apreciadas para la industria ovina.
Entre algunos precios estimados, las hembras certificadas pueden alcanzar precios de más de cinco mil pesos. Por otra parte, los machos oscilan entre los ocho y diez mil pesos.
Como se mencionó anteriormente, Hidalgo, Veracruz y Jalisco se encuentran dentro de los estados con mayor producción de carne de ovino, lo que se traduce en 697,947, 504,305 y 394,223 toneladas, respectivamente.
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