En 2021, el festejo del Día del Niño se dará en un contexto de tensión, con infantes cansados, aumento de violencia intrafamiliar y, en algunos casos, hasta incorporación a la vida laboral por la pérdida de empleo de los padres, declaró Delia Domínguez Morales, académica de la Universidad Veracruzana.
La doctora en investigación psicológica en educación inclusiva explicó en entrevista que el confinamiento por la pandemia ha causado afectaciones en niños y niñas en las áreas de aprendizaje, nutrición y socialización.
Explicó que las escuelas son un lugar esencial para su desarrollo pues es en ellas donde pueden interactuar con sus compañeros, buscar apoyo, acceder a servicios de salud y hasta de comida con los desayunos escolares. Brindar apoyo y contención emocional, dijo, son esenciales para estos tiempos de crisis.
NIÑOS CON DUELOS
En cuanto a niños, niñas y adolescentes que viven duelos ante el fallecimiento de sus padres, tutores o familiares cercanos, mencionó la urgencia de darles atención psicosocial.
Además de lo expuesto, especialistas en psicología y educación infantil coinciden que este 30 de abril se debe hablar de los derechos de chicos y chicas, quienes han sido “los grandes olvidados y los sin voz” durante la contingencia sanitaria.
La educadora Carolina Villarreal dijo que es impostergable que el Estado genere mecanismos que permitan atender a los afectados y puedan tener “un duelo sano a través de un acompañamiento consciente y amoroso”.
Al respecto, la psicóloga infantil Patricia del Ángel Cortés advierte que los duelos podrían ser más prolongados ante la ausencia de los amigos y los juegos, entorno que provee la asistencia a las escuelas.
Ante el cada vez más cercano retorno a clases, considera que los profesores tendrán que mostrar una mayor empatía para contribuir a reducir, a través del juego, las secuelas de los posibles daños emocionales.
Al respecto, opina que se debe privilegiar actividades que fomenten la capacidad de resistencia y la recuperación psico-afectiva en la población infantil.
La especialista manifiesta que la labor de los docentes se vislumbra muy ardua, motivo por el cual quienes estén a cargo de niños con duelo tendrán que comunicarlo y trabajar de manera conjunta.
Aunque en Veracruz todavía no hay fechas específicas para el retorno a las aulas, cree que si se hace de manera paulatina y responsable sí habrá beneficios.
“La convivencia en su comunidad ayudará al niño o niña con pérdidas a aliviar sus temores y recuperar la alegría propia de esta etapa”, expuso.
INTERVENCIÓN DEL ESTADO
“En tanto seres humanos con derechos y con necesidades individuales ante una crisis sanitaria, económica y hasta afectiva, los niños deben ser tratados con respeto y se tienen que diseñar programas especiales que vengan desde el mismo Estado”, manifestó la doctora en psicología María del Carmen Hinojosa Martínez.
Explicó que está comprobado y documentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe que cualquier desastre o contingencia tiene un impacto diferenciado en la población infantil, de acuerdo con su contexto económico.
“Como ha sucedido a lo largo de la historia, los más afectados son quienes viven en condiciones de pobreza, quienes además son los más vulnerables a distintas violencias”.
Ante un panorama incierto, María del Carmen Hinojosa llamó a las instancias correspondientes a actuar con rapidez y eficacia en favor de la niñez veracruzana.
Y es que al hablar de entornos violentos, la educadora Denise Shantall Valencia Romero indicó que es tiempo de fomentar una sociedad y una forma de vida que deje atrás el “adultocentrismo” para dar paso al respeto y a los niños.
“Creo que una cultura de respeto que resuelve lo cotidiano lejano a la violencia abona a una sociedad más pacífica y en armonía. Individuos que desde pequeños se saben respetados, reconocen su valía y merecimiento de paz”, apuntó.