Córdoba, Ver.- Desde 1900 existe una edificación que alberga historia, recuerdos para los ciudadanos longevos y transformaciones, el Centro Cultural Casa Baltazar que actualmente funge como espacio de cafetería y presentaciones, en su interior se pueden apreciar máquinas cafeteras que datan de los años 40.
Luis Javier Rodríguez, director de curaduría y programación del lugar, mencionó que desde el año 1900 la edificación fungió como una tienda de abarrotes donde se expedía el café de la marca Café de Córdoba, el cual actualmente podemos encontrar en sus inmediaciones como venta y consumo.
Severo y Baltazar Sánchez eran los encargados de administrar la tienda de abarrotes la cual era un negocio familiar, existen fotografías registradas del año de 1927 de las personas posadas a las afueras de la tienda.
En aquella época por la parte trasera a la tienda pasaba el tren del Huatusquito, “era una de las zonas más importantes de la ciudad, ya que por la calle de atrás pasaba el tren del Huatusquito, donde venía gente de la Sierra del Gallego a comprar”, expresó Javier Rodríguez.
Frente a la tienda se encontraba una cantina, donde las personas que entraban pasaban con Baltazar Sánchez a dejar encargada el arma y evitar problemas.
Acotó que los visitan personas de aproximadamente 60 años o más donde le expresan que ellos cuando niños acudían al inmueble a comprar víveres o café.
Actualmente la que fue tienda de abarrotes, pasando por una bodega, ahora se ha convertido en un centro cultural que es histórico en la ciudad con maquinaria de café que llama la atención.
Uno de ellos, es un tostados de bola “la gente especialista en café se sorprende que tengamos este equipo en nuestras inmediaciones el cual funcionaba con carbón o diesel”.
En el 2014 se empieza a trabajar en el proyecto del lugar, esto en coordinación con un despacho de interiorismo de la Ciudad de México, los cuales diseñaron la imagen, el mobiliario y la estructura del lugar, ya que el recinto sufrió varias remodelaciones.
A pesar de ser una edificación que data de muchos años, no es considerada un inmueble perteneciente al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), pero sí tuvieron que pedir un permiso especial y mostrar ante ellos las modificaciones que se iban a realizar.
Cabe mencionar que el carpintero diseñador de las mesas y las sillas que se encuentran actualmente en Casa Baltazar fueron realizadas por Carlos Ross, de Huatusco.
Dentro de las inmediaciones y en el patio central podemos apreciar presentaciones contemporáneas, en sus salas diversas exhibiciones y por las noches disfrutar de una buena taza de café en un cine.