/ viernes 15 de julio de 2022

Se fueron a EU para poder tener una casa... "ya están con Dios"

La fe movió los corazones de los cientos de personas de San Marcos Atexquilapan en Naolinco, para no dejarlos solos

La fe está dando calma y fortaleza a los padres de Yovani, Jaír y Misael al velar sus cuerpos tras haber perdido la vida el 27 de junio al interior de un tráiler en San Antonio, Texas en el que se trasladaban más de 50 migrantes con la ilusión de cumplir sus sueños en el país del norte. La misma fe que mueve los corazones de los cientos de personas de San Marcos Atexquilapan en Naolinco, para no dejarlos solos desde ese fatídico día.

"Yo sé que ellos ya están con Diosito, ya no van a sufrir y eso es lo que me va a ayudar, los buenos recuerdos", dice Yolanda Olivares Ruiz madre de Yovani y Jaír, quienes, asegura, eran muy allegados a la iglesia y viajaban a retiros espirituales a la Ciudad de México.

Cerca del ataúd de sus hijos y su sobrino, con una chamarra negra, los ojos cansados, con ojeras por las pocas horas de sueño y ya sin poder llorar, dice que es su fe y la solidaridad de la gente lo que los mantiene de pie.

“Mi fe es que ellos eran buenos y tengo la seguridad de que ellos están con Dios y eso me va a mantener fuerte para salir adelante (…) ahorita estamos más tranquilos después de tantos días de angustia, primero de no saber de ellos, después cuando nos dieron la noticia que desgraciadamente estaban entre los fallecidos, ahorita gracias a Dios ya los tenemos”.

Con cansancio y el corazón roto dice que se queda con los mejores recuerdos de sus hijos porque "yo sé que ellos ya están con Diosito, ya no van a sufrir y eso es lo que me va a ayudar, los buenos recuerdos no los malos. Ellos eran mi alegría, eran todo, porque eran muy relajos, echaban mucho relajo, los voy a extrañar mucho, mucho, se va parte de mi vida porque esto no tiene remedio ya, ni cura ni nada".

Los sueños de Misael "Sami", Yovani "Bocho" y Jaír "Pollo" como se lee en las coronas de flores, eran que al irse a trabajar a Estados Unidos podrían tener dinero para tener su propia casa, poner un negocio o comprarse un carro. Otra ilusión de los hermanos de 16 y 20 años, era ponerle un negocio de calzado de fábrica para su papá; ahora la familia va a luchar para que se haga realidad en su honor.

Misael de 16 años, destacó por ser un buen portero en su equipo de fútbol, y con esos recuerdos se queda su madre Hermelinda Monterde Jiménez y no solo eso, en una de las fotos que pusieron de él le colocaron una medalla, que según su madre corresponde al grupo de Adoración Nocturna Mexicana del que participaba adorando al Santísimo.

“Esa medalla se la vamos a poner y se va a ir con ella porque él se la ganó participando en la sección que estamos porque nosotros también somos adoradores del Santísimo, nosotros somos muy creyentes del santísimo y la virgencita de Guadalupe, somos católicos de corazón y eso es lo que nos ha mantenido de pie y con la ayuda de todos los que nos están apoyando no sé desde donde con sus oraciones, nos ha servido de mucho y nos ha dado mucha fuerza para seguir adelante”.

Y agrega: “Eran jóvenes muy trabajadores y su deseo y sus sueños era ir a trabajar, hacer sus casas, a lo mejor. Él se dedicaba a los zapatos y sus ratos libres eran para jugar”.

San Marcos Atexquilapan, una comunidad católica

A la entrada a la comunidad de San Marcos Atexquilapan, hay una pared donde escribieron en letras verdes: “Bendito el que Viene en el Nombre del Señor Mc 11, 1-10”, en referencia evangelio según San Marcos, más adentro hay más bardas con otras frases: “Deja cualquier cosa por Dios…pero nunca dejes a Dios por cualquier cosa” o “Dios eres el sol que le da esperanza a mi día”.

“Aquí somos muy católicos, todo el pueblo, aquí protestantes no hay, habrá uno o dos, pero no, eso no. Acá somos muy unidos en la religión, toda la gente apoya y como dice la iglesia todos creemos en Dios y la forma de creer es ayudándonos los unos a los otros y así ha sido, este es considerado uno de los pueblos más unidos en todo”, agrega Guadalupe Ruiz tía de los jóvenes quien no ha dejado de acudir a la casa de los abuelos donde ahora son velados, en la calle 5 de mayo, en el corazón de San Marcos.

Y es que desde el pasado 27 de junio, las muestras de cariño y respaldo no han parado, familiares, amigos, conocidos y hasta personas que no habían visto antes, han llegado a acompañar a quienes han perdido parte de su vida, los padres de los chicos que iban en busca de mejores oportunidades de vida.

Al filo de la medianoche del miércoles, llegaron a la localidad los féretros de color blanco y azul. Una enorme lona y sillas fueron colocadas en la calle para quienes esperaban con la familia. Cientos de pobladores esperaron en la entrada de la localidad para escoltar las carrozas blancas que los trasladaban.

Hasta ahora, siguen siendo decenas de personas las que continúan brindando su ayuda, mientras las mujeres preparan el chilposo y los tamales, los hombres matan y destazan los cerdos que compraron o que les donaron para tener algo que ofrecer a quienes llegan al velorio.

“Todos los días estamos aquí porque todos los días viene gente y aquí lo poquito que se les puede dar, un taco, frijolitos, a todos los que vienen se les da de comer”, agrega Guadalupe.

Porque no llegan solo de San Marcos, sino de Xalapa, Naolinco, Acatlán, Miahuatlán, Chiconquiaco, Zacatal y muchos otros lugares.

“El pueblo es muy unido, tanto nos apoyan con trabajo, poquito lo que pueden aportar y la gente es muy unida, no nos deja, no nos ha dejado desde el día de la tragedia y es lo que nos fortalece a nosotros”, agrega.

Será este viernes 15 de julio alrededor de las 14:00 horas cuando se lleve a cabo el sepelio después de la eucaristía en la iglesia de la localidad, por lo que ya se preparan para dar de comer a la multitud que los acompañará.

Amantes del futbol y de las Chivas de Guadalajara

“Deportivo San Marcos” era el equipo de futbol en el que jugaban los tres jóvenes aficionados de las Chivas de Guadalajara dice Gerardo Olivares papá de Misael, quien señala que lograron ganar la copa de la liga de San José Miahuatlán, donde Jaír fue campeón de goleo.

Gerardo también juega en el equipo que es familiar; el futbol es un gusto heredado por el abuelo de los jóvenes que se los fue inculcando y del que se fueron apasionando.

Incluso confiesa que Misael se llama así por el jugador de las Chivas Missael Espinoza; a sus otros dos hijos también les puso nombres de futbolistas del “rebaño sagrado”.

“Ahora tengo otros dos hijos que igual juegan en el equipo y a seguir, seguir disfrutando de ese sano deporte. Toda la familia somos 100 por ciento Chivas, mi hijo Misael se llama así porque en su momento conocí a Missael Espinoza y me encantaba como jugaba y por eso le puse ese nombre, tengo otro hijo que se llama Oswaldo y también es por Oswaldo Sánchez y tengo un hijo que se llama Jonathan que igual es por Jonathan dos Santos, el deporte es algo que nos alienta a seguir viviendo, nos ayuda a distraer la mente de problemas, de cosas que tiene uno y disfrutamos del futbol”.

Justo abajo de los ataúdes de los jóvenes, fueron colocados tres balones de futbol con la leyenda “nunca te olvidaremos”, a un lado hay varias fotografías del equipo, todos con sus playeras rojiblancas, además de trofeos y recuerdos del equipo.

Nota publicada en Diario de Xalapa

La fe está dando calma y fortaleza a los padres de Yovani, Jaír y Misael al velar sus cuerpos tras haber perdido la vida el 27 de junio al interior de un tráiler en San Antonio, Texas en el que se trasladaban más de 50 migrantes con la ilusión de cumplir sus sueños en el país del norte. La misma fe que mueve los corazones de los cientos de personas de San Marcos Atexquilapan en Naolinco, para no dejarlos solos desde ese fatídico día.

"Yo sé que ellos ya están con Diosito, ya no van a sufrir y eso es lo que me va a ayudar, los buenos recuerdos", dice Yolanda Olivares Ruiz madre de Yovani y Jaír, quienes, asegura, eran muy allegados a la iglesia y viajaban a retiros espirituales a la Ciudad de México.

Cerca del ataúd de sus hijos y su sobrino, con una chamarra negra, los ojos cansados, con ojeras por las pocas horas de sueño y ya sin poder llorar, dice que es su fe y la solidaridad de la gente lo que los mantiene de pie.

“Mi fe es que ellos eran buenos y tengo la seguridad de que ellos están con Dios y eso me va a mantener fuerte para salir adelante (…) ahorita estamos más tranquilos después de tantos días de angustia, primero de no saber de ellos, después cuando nos dieron la noticia que desgraciadamente estaban entre los fallecidos, ahorita gracias a Dios ya los tenemos”.

Con cansancio y el corazón roto dice que se queda con los mejores recuerdos de sus hijos porque "yo sé que ellos ya están con Diosito, ya no van a sufrir y eso es lo que me va a ayudar, los buenos recuerdos no los malos. Ellos eran mi alegría, eran todo, porque eran muy relajos, echaban mucho relajo, los voy a extrañar mucho, mucho, se va parte de mi vida porque esto no tiene remedio ya, ni cura ni nada".

Los sueños de Misael "Sami", Yovani "Bocho" y Jaír "Pollo" como se lee en las coronas de flores, eran que al irse a trabajar a Estados Unidos podrían tener dinero para tener su propia casa, poner un negocio o comprarse un carro. Otra ilusión de los hermanos de 16 y 20 años, era ponerle un negocio de calzado de fábrica para su papá; ahora la familia va a luchar para que se haga realidad en su honor.

Misael de 16 años, destacó por ser un buen portero en su equipo de fútbol, y con esos recuerdos se queda su madre Hermelinda Monterde Jiménez y no solo eso, en una de las fotos que pusieron de él le colocaron una medalla, que según su madre corresponde al grupo de Adoración Nocturna Mexicana del que participaba adorando al Santísimo.

“Esa medalla se la vamos a poner y se va a ir con ella porque él se la ganó participando en la sección que estamos porque nosotros también somos adoradores del Santísimo, nosotros somos muy creyentes del santísimo y la virgencita de Guadalupe, somos católicos de corazón y eso es lo que nos ha mantenido de pie y con la ayuda de todos los que nos están apoyando no sé desde donde con sus oraciones, nos ha servido de mucho y nos ha dado mucha fuerza para seguir adelante”.

Y agrega: “Eran jóvenes muy trabajadores y su deseo y sus sueños era ir a trabajar, hacer sus casas, a lo mejor. Él se dedicaba a los zapatos y sus ratos libres eran para jugar”.

San Marcos Atexquilapan, una comunidad católica

A la entrada a la comunidad de San Marcos Atexquilapan, hay una pared donde escribieron en letras verdes: “Bendito el que Viene en el Nombre del Señor Mc 11, 1-10”, en referencia evangelio según San Marcos, más adentro hay más bardas con otras frases: “Deja cualquier cosa por Dios…pero nunca dejes a Dios por cualquier cosa” o “Dios eres el sol que le da esperanza a mi día”.

“Aquí somos muy católicos, todo el pueblo, aquí protestantes no hay, habrá uno o dos, pero no, eso no. Acá somos muy unidos en la religión, toda la gente apoya y como dice la iglesia todos creemos en Dios y la forma de creer es ayudándonos los unos a los otros y así ha sido, este es considerado uno de los pueblos más unidos en todo”, agrega Guadalupe Ruiz tía de los jóvenes quien no ha dejado de acudir a la casa de los abuelos donde ahora son velados, en la calle 5 de mayo, en el corazón de San Marcos.

Y es que desde el pasado 27 de junio, las muestras de cariño y respaldo no han parado, familiares, amigos, conocidos y hasta personas que no habían visto antes, han llegado a acompañar a quienes han perdido parte de su vida, los padres de los chicos que iban en busca de mejores oportunidades de vida.

Al filo de la medianoche del miércoles, llegaron a la localidad los féretros de color blanco y azul. Una enorme lona y sillas fueron colocadas en la calle para quienes esperaban con la familia. Cientos de pobladores esperaron en la entrada de la localidad para escoltar las carrozas blancas que los trasladaban.

Hasta ahora, siguen siendo decenas de personas las que continúan brindando su ayuda, mientras las mujeres preparan el chilposo y los tamales, los hombres matan y destazan los cerdos que compraron o que les donaron para tener algo que ofrecer a quienes llegan al velorio.

“Todos los días estamos aquí porque todos los días viene gente y aquí lo poquito que se les puede dar, un taco, frijolitos, a todos los que vienen se les da de comer”, agrega Guadalupe.

Porque no llegan solo de San Marcos, sino de Xalapa, Naolinco, Acatlán, Miahuatlán, Chiconquiaco, Zacatal y muchos otros lugares.

“El pueblo es muy unido, tanto nos apoyan con trabajo, poquito lo que pueden aportar y la gente es muy unida, no nos deja, no nos ha dejado desde el día de la tragedia y es lo que nos fortalece a nosotros”, agrega.

Será este viernes 15 de julio alrededor de las 14:00 horas cuando se lleve a cabo el sepelio después de la eucaristía en la iglesia de la localidad, por lo que ya se preparan para dar de comer a la multitud que los acompañará.

Amantes del futbol y de las Chivas de Guadalajara

“Deportivo San Marcos” era el equipo de futbol en el que jugaban los tres jóvenes aficionados de las Chivas de Guadalajara dice Gerardo Olivares papá de Misael, quien señala que lograron ganar la copa de la liga de San José Miahuatlán, donde Jaír fue campeón de goleo.

Gerardo también juega en el equipo que es familiar; el futbol es un gusto heredado por el abuelo de los jóvenes que se los fue inculcando y del que se fueron apasionando.

Incluso confiesa que Misael se llama así por el jugador de las Chivas Missael Espinoza; a sus otros dos hijos también les puso nombres de futbolistas del “rebaño sagrado”.

“Ahora tengo otros dos hijos que igual juegan en el equipo y a seguir, seguir disfrutando de ese sano deporte. Toda la familia somos 100 por ciento Chivas, mi hijo Misael se llama así porque en su momento conocí a Missael Espinoza y me encantaba como jugaba y por eso le puse ese nombre, tengo otro hijo que se llama Oswaldo y también es por Oswaldo Sánchez y tengo un hijo que se llama Jonathan que igual es por Jonathan dos Santos, el deporte es algo que nos alienta a seguir viviendo, nos ayuda a distraer la mente de problemas, de cosas que tiene uno y disfrutamos del futbol”.

Justo abajo de los ataúdes de los jóvenes, fueron colocados tres balones de futbol con la leyenda “nunca te olvidaremos”, a un lado hay varias fotografías del equipo, todos con sus playeras rojiblancas, además de trofeos y recuerdos del equipo.

Nota publicada en Diario de Xalapa

Local

Todo listo para el Gran Sorteo Canaco 2024 en Córdoba

En su trigésima quinta edición, ya se logró la colocación del total de los boletos expedidos

Local

Con venta de productos orgánicos mujeres de la sierra de Zongolica sacan adelante a sus familias

Algunas mujeres se dedican al cuidado de gallinas ponedoras y, aunque no todo el producto que obtienen de ellas se puede decir que es 100% orgánico

Local

Tras 30 años de estar en el olvido edificio del Cine Olimpia será rehabilitado

El inmueble cuenta con denominación de Edificio con Valor Artístico por parte del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura

Local

En Veracruz, música en vivo es amenazada por karaoke y celulares

Este viernes, 22 de noviembre celebran a Santa Cecilia, su patrona, a quien se encomiendan y piden por el eterno descanso de quienes se adelantaron en el camino

Doble Vía

Jorge Reyes, músico con 60 años de trayectoria deleitando a la población en el género ranchero

Jorge Reyes viste en la mayor de las veces de mariachi, sus trajes elegantes solo revelan su trayectoria en el mundo de la música

Cultura

Orquesta Clásica de Orizaba festejará a Santa Cecilia en parroquia San José de Gracia

La misa tiene también como intención pedir por el eterno descanso de quienes fueron parte de la OCO y se adelantaron en el camino