Estilistas se reinventan a causa de la pandemia por Covid-19

Para Mary Hernández reactivar el pequeño “Studio de Belleza Mary Hiren” fue difícil y requirió inversión, pues tuvo que reinventarlo

Mayra Figueiras | El Sol de Orizaba

  · martes 23 de agosto de 2022

Para conservar a su clientela se reinventó y se capacita constantemente / Foto ilustrativa: Pexels

ORIZABA, Ver.- Tras dos años de la pandemia y de mantener cerrado su negocio por tres meses cuando el confinamiento fue total, para Mary Hernández reactivar el pequeño “Studio de Belleza Mary Hiren” fue difícil y requirió inversión, pues tuvo que reinventarlo a pesar de no tener el ingreso suficiente, para recuperarlo.

Señala que en un principio ante la información que se tenía sobre la pandemia de Covid-19 y de sus efectos decidió cerrarlo con la idea de que todo mejorara al término de la primera cuarentena, “pero se extendió y estuvimos cerrados durante tres meses”.

Pasado ese tiempo, se planteó retomar el servicio, que generalmente daba a domicilio o en su casa, pero primero tuvo que reunir dinero para comprar todos los insumos que se requieren obligadamente para evitar el contagio.

Al estar en el pico de la pandemia los insumos triplicaron su costo / Foto: Cortesía | Studio Mary Hiren

“Aunque ya teníamos protocolos de higiene y limpieza, agregamos la toma de temperatura, uso de gel, de cubrebocas en los clientes y la desinfección de las instalaciones entre cliente y cliente”, todo esto de manera obligada.

Señala que sí tuvo que hacer una buena inversión, ya que, al estar en el pico de la pandemia los insumos triplicaron su costo; de manera que comprar termómetros, artículos para la desinfección y líquidos de limpieza fue costoso, “pero no había de otra más que comprarlos”, señala.

Aumento de precio a productos, cambió tarifas

Además del incremento en los insumos para hacer frente a la pandemia, aumentó también el precio de los productos que utiliza en su negocio, por lo que tuvo que modificar el costo de sus servicios, aunque en un porcentaje que no afectara la economía de sus clientas. Con base a costos, se subió solo un 7% y el resto lo absorbió el estudio.

Mary siempre ha trabajado mediante cita y por recomendación, así se ha mantenido durante todo este tiempo.

Para Mary Hernández reactivar el pequeño “Studio de Belleza Mary Hiren” fue difícil / Foto: Cortesía | Studio Mary Hiren

Para conservar a su clientela se reinventó y se capacita constantemente, además de ofrecer un servicio con productos de calidad, tanto en maquillaje, peinados, planchado de cejas, uñas de acrílico y gel, da atención personalizada a cada una de ellas, además de que les ofrece un lugar seguro, así como instalaciones limpias y herramientas que desinfecta de acuerdo con estrictos protocolos para consentirlas en cada visita.

Nota publicada en El Sol de Orizaba