Córdoba, Ver.- Ciudadanos de Orizaba, Amatlán, Yanga y Córdoba son algunos que se han dado cita en la Laguna del Porvenir que desde hace aproximadamente un mes ha empezado a reactivarse económicamente pues los paseos en trajineras y la venta de comida se ha puesto otra vez luego de estar 6 meses sin actividad.
Los lancheros de la laguna vieron mermada su economía pues de ese empleo generaban un extra, dedicados al campo, corte y cosecha fue como lograron subsistir.
Cecilio Sorcia Martínez, dijo que fueron alrededor de 10 lancheros que tuvieron que dejar el negocio pues al darse la declaratoria de alerta roja respecto a la pandemia de covid-19 autoridades municipales pidieron cerrar lugares donde se tenía aglomeración de personas
“Decidimos cerrar pues si subíamos a una personas con el virus sin darnos cuenta ya habría contagiado a más gente y nosotros a nuestras familias”, dijo.
Alrededor de 500 personas en un fin de semana llegan a registrarse desde hace una mes, el entrevistado refirió que las personas toman sus propias medidas de seguridad pues usan gel antibacterial y cubrebocas.
Mencionó que es el turismo local el que ha llegado a la laguna a pasar un momento agradable entre familia y cabe hacer mención que no existe aglomeración pues el espacio es amplio.
Don Cecilio recordó que el año pasado todavía le tocó subir a su trajinera “Guadalupe” a un grupo de extranjeros provenientes de Suecia, así como japoneses, pero ahora este tipo de turismo no se está viendo.
La Laguna del Porvenir es un espacio abierto donde se da la pesca de mojarra y recolección de caracoles, que también fungen como apoyo económico y alimenticio para las personas que allí radican o laboran.
“Nosotros le estamos agradecidos a la laguna por ello le hacemos su mantenimiento, le quitamos la basura y las ramas u hojas que llegan a caer de los árboles, tratamos de tenerla bien, pero si requerimos de otras cosas como un muelle nuevo”.
Sobre el tema Mariano Sorcia Martínez, un hombre de 57 años pidió apoyo a las autoridades municipales, estatales, al sector empresarial y a la ciudadanía a la donación de bancas y juegos recreativos para poder embellecer la laguna, "nos dicen que cuidemos este lugar, que nos apoyen a mandar el turismo acá y podamos tener un trabajo e ingreso”.