Córdoba, Ver.- Por mala alimentación y falta de ejercicio crece a pasos agigantados la cifra de menores de edad con diabetes tipo II en Córdoba, lo cual representa una alerta para los padres de familia, quienes deben poner más atención a sus hijos.
De los 450 pacientes diabéticos atendidos en la unidad de Vigilancia Integral en Diabetes y Alimentación (VIDA) de la Jurisdicción Sanitaria de Córdoba, ocho menores tienen diabetes tipo II, todos tienen sobrepeso y obesidad como consecuencia de consumir carbohidratos en exceso y llevar una vida sedentaria.
Salustia Rosas Ortiz, encargada de la unidad VIDA, mostró su preocupación porque entre los pacientes hay niños de dos y ocho años, quienes llegaron con los niveles de glucosa alta porque no consumían vegetales y ni hacían ejercicio.
Ante ello se les modificó sus hábitos alimenticios y estilos de vida, y no tuvieron necesidad de consumir fármacos, así que la diabetes se puede revertir.
Los casos de diabetes empezaron a detectarse hace dos años, cuando el personal médico comenzó a asistir a las escuelas para dar pláticas de nutrición y buscar casos intencionados, una primera señal es tener el cuello negro lo que se conoce como “acantosis nigricans”, y axilas negras, que significa que puede ser resistente a la insulina.