Córdoba, Ver.- Colocar cruces a las tumbas en memoria de los que han fallecido es un símbolo de la fe cristiana y el significado es la esperanza en la resurrección y la vida eterna, explica en entrevista Rosa Vera, hija de José Vera Castro, propietarios del negocio "Crucería Callejas" desde hace más de 60 años.
Su pequeño negocio esta ubicado entre los barrios de San Antonio y Las Pitayitas, en la avenida 4 entre calles 1 y 3 en la colonia Centro, ahí parece que se detuvo el tiempo, pues es una antigua casa de la llamadas hechas de cal y canto, aun con teja.
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El señor José tiene 90 años y sigue trabajando en esta crucería en donde él elabora las cruces hay de madera de cedro, pino, encino y xochicuahuitl, además de fierro o de acero inoxidable.
¿Cuánto cuesta una cruz de muerto en Córdoba?
Los precios varían de acuerdo al material que llevan explica Rosa Vera, quien agregó que la mas económica es de 500 pesos y hay hasta de 2 mil 500 pesos o más, pero depende de lo que quiera la persona pues unos quieren una imagen especial, la placa o algol extra.
Menciona que la cruz es un significado muy especial, debe ser solicitada por un padrino, no puede ser el familiar directo del difunto, además lleva alguna imagen, la corona de cristo, el pendal que significa el manto de Cristo.
Otra creencia que se tiene es que la cruz que se coloca en la tumba a los 9 días del fallecimiento debe ser de madera, al año ya es la metal con alguna imagen de un santo.
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Agregó la entrevistada que con la pandemia se elevó el servicio de cremación y con ello empezaron a elaborar cruces pequeñas, para don José no hay imposibles y hace lo que le piden pues cada quien tiene ideas para sus difuntos.
“No hay una temporada especial, pues todo el año hay muertos, quizá después de noviembre en Todos Santos, la gente va al panteón y se dan cuenta que las cruces ya están deterioradas y es cuando las vienen a solicitar para cambiarla” explica.
Mencionó que mucha gente no pide cruces muy caras porque se las roban, sobre todo las que tienen imágenes bonitas o de algún material costoso, pese a que es una costumbre de personas adultas, la gente sigue respetando a sus difuntos y colocar una cruz es un símbolo de que su alma descansará en paz.
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Crucería Callejas sigue siendo atendida por José Vera, quien tiene 90 años de edad, corta, pule, pinta, adorna y ahí se le va el día. Su negocio abre de lunes a sábado de 9 de la mañana a 8 de la noche durante todo el año.
Su hija desde pequeña está ahí en el lugar, pues es un negocio familiar y ella le ayuda, recuerda que desde los 10 años de edad empezó a aprender a hacer las cruces y hoy continua apoyando a su padre.