Córdoba, Ver.- En lo que va de la administración estatal actual, el Instituto Veracruzano de las Mujeres (IVM) ha salvado a más de cien mujeres de ser víctimas de feminicidios, señala Rocío Villafuerte, encargada de despacho de dicho instituto.
Y es que destaca que durante los dos años más fuertes de la emergencia sanitaria por Covid-19 se registró un incremento considerable de violencia hacia las mujeres, principalmente por el periodo de confinamiento social, así como por la dificultada de las mujeres para salir a denunciar este tipo de situaciones.
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“No es oculto para nadie que sí tenemos altos índices - de violencia - que Veracruz no es la excepción, pero al mismo tiempo hay una inercia muy notoria de parte de autoridades que procuran la impartición de justicia y las instancias que somos coadyuvantes como el Instituto Veracruzano de la Mujer”, comenta.
Y es que afirma que tan solo en lo que va de la administración estatal actual se ha logrado albergar en el Refugio Estatal para Mujeres en Situación de Violencia a más de cien mujeres que están en riesgo de ser víctimas de feminicidios de continuar en el entorno del que fueron rescatadas.
“Esa es una estrategia que se instituyó a partir de la declaratoria Alerta de Alertas de Género y en esa situación se erigió una institución, es un edificio, el segundo más grande la República, y hemos recibido a más de cien mujeres que estaban en riesgo de violencia feminicida”, explica.
¿Cómo se trabaja en el refugio para mujeres violentadas?
Precisa que en este refugio se realiza un trabajo de rescate integral a la víctima desde su empoderamiento personal hasta hacerle entender que vivir con violencia no es algo natural o cultura y por lo cual se le brindan las herramientas necesarias para que puedan salir de ese círculo de violencia.
En estos refugios se brinda atención psicológica y jurídica a las víctimas a fin de que puedan ir avanzando poco a poco para lograr romper esa cadena de violencia a través de manuales bien constituidos y avalados en atención a mujeres.
Cada una de las víctimas pueden estar en este refugio durante un periodo no mayor a tres meses, tiempo en el que se busca empoderarlas para poder sacarlas del círculo de violencia y una vez que se concluye este periodo se reincorpora a una red de apoyo que puede ser con familiares o se canalizan a otros refugios a nivel nacional.
En relación al recorte del presupuesto para atención a las alertas de género, la encargada del IVM señala que hasta el momento no ha recibido ningún decremento en recursos por parte de la Federación y de lo estatal hasta ahora no tienen reporte alguno, aunque destaca que el instituto trabaja con los recursos que le son asignados.