Coscomatepec, Ver.- Vecinos de este poblado dicen haber sido presuntamente defraudados por el exalcalde Manuel Álvarez con la construcción de casas que tuvieron que haberse entregado a mediados de 2014.
Señalan que son al menos 70 familias las presuntas defraudadas y que cada una dio 12 mil pesos en efectivo con la esperanza de recibir una vivienda económica. Algunos pagaron lo de dos casas.
Doña Fernanda asegura que el expresidente municipal presuntamente aprovechó la tragedia del deslave de septiembre de 2013 para ofrecer viviendas similares a las que donaron a los damnificados por la tragedia. Presuntamente había el respaldo económico de una fundación.
Durante los cuatro años de la administración de Manuel Álvarez (2014–2017) los vecinos exigieron al entonces alcalde cumplir con su promesa, pero aseguran que a la fecha se niega incluso a devolverles su dinero.
Acusan que presuntamente otra persona, identificada como Fernando, de haberse asociado con el entonces presidente municipal para convencerlos de invertir en las viviendas.
Las casas se construirían en este poblado de Tecoac, sin embargo, tampoco se les enseñó el terreno donde supuestamente quedarían instaladas.
Los afectados batallaron para conseguir el recurso, pues en algunos casos de plano salieron del municipio para buscar un extra en otros lugares como Córdoba y Orizaba. También recurrieron a préstamos, que no han podido pagar.
Entre los defraudados hay quienes han buscado al exalcalde en su domicilio, sin que lo hayan localizado. Dicen que el día que lo encuentren están decididos a desnudarlo y pasearlo amarrado en un burro, por todo Coscomatepec.
FAMILIAS DAMNIFICADAS POR EL DESLAVE DEL 9 DE SEPTIEMBRE DE 2013
Cobró la vida de 13 personas y devastó sus viviendas, quienes han batallado a lo largo de los siguientes años porque las casas que les entregaron como apoyo eran solamente el puro cascarón.
Las familias damnificadas fueron reubicadas a una zona que consideran más segura, a pesar de estar situadas a orillas de un cerro. En ese lugar recibieron el respaldo de las autoridades municipales y de una fundación para construir sus nuevas viviendas.
Las casas tardaron en ser construidas casi medio año, pero no quedaron bien terminadas. Sus habitantes al recibirlas se dieron cuenta de que sus instalaciones eléctricas y su red de agua estaban inconclusas.
Los damnificados pasaron el tiempo en casas de sus vecinos, quienes además los apoyaron con alimentos. Al necesitar las viviendas tuvieron que aceptarlas sin que estuvieran bien terminadas y comenzar con su rehabilitación.
A partir de ese momento, además de trabajar en busca de recursos para el gasto diario, tuvieron que destinar una parte para la rehabilitación de sus casas, que a la fecha no ha concluido.
Los hechos se remontan a la tarde del 9 de septiembre de 2013, cuando el desgajamiento de un cerro sepultó tres viviendas y afectó seis más en el lugar conocido como El Arenal. En el lugar fallecieron 13 personas, la mayoría menores, entre ellos algunos bebés.
El Ejército activó el Plan DNIII y junto con voluntarios removieron toneladas de tierra, piedras y lodo para recuperar los cuerpos. En el lugar de la tragedia fueron sembrados pinos.
Las nueve familias afectadas fueron reubicadas y recibieron el apoyo del Ayuntamiento para la construcción de casas nuevas, que carecían de un adecuado sistema de red eléctrica y de agua potable, además de que no tenían piso.