Desechos con Covid-19 podrían generar una fuente de infección masiva: ambientalistas

Hicieron un llamado a los tres niveles de gobierno a reforzar las acciones en los rellenos sanitarios

Karla Cancino | Diario de Xalapa

  · martes 14 de abril de 2020

Foto: Jaime Ramírez | El Sol de Córdoba

Con el aumento de los casos de Covid-19 en la entidad incrementa también la cantidad de residuos peligrosos biológico infecciosos (RPBI) que se generan no sólo en hospitales, clínicas y centros de salud, sino también en las casas. Ante esta situación, el presidente del Consejo Intermunicipal de Ambientalistas y coordinador de la Iniciativa Ciudadana Ambiental Veracruz, Graciano Illescas Téllez, hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno a reforzar las acciones en los rellenos sanitarios, con el fin de evitar que los desechos con Covid-19 creen una fuente de infección masiva.

Apuntó que el mayor riesgo es que esos desechos vayan a parar a alguno de los mil 600 tiraderos ilegales de basura que existen en Veracruz, ya que estos espacios no cuentan con los mínimos protocolos en materia de ambiente y salud, por lo que la propagación del virus puede continuar.

De acuerdo con la NOM-087-SEMARNAT-SSA1-2002, los residuos peligrosos biológico-infecciosos (RPBI) son residuos generados durante los servicios de atención médica que contengan agentes biológicos infecciosos y que puedan causar efectos nocivos a la salud y al ambiente. Este mismo documento establece criterios específicos de recolección y transporte externo, tratamiento y disposición final de los residuos. “Una vez que estos residuos son tratados de forma que se garantice la eliminación de los agentes biológicos infecciosos que contengan, deberán hacerse irreconocibles, y solo entonces podrán disponerse como residuos no peligrosos en sitios autorizados para el efecto”, indica el documento.

En entrevista Illescas Téllez expuso que aunque los protocolos que establece la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para el tratamiento de los desechos considerados como peligrosos a nivel infeccioso son claros y se les da seguimiento, el tamaño de la emergencia y el pronóstico del número de personas que tendrán Covid-19 hace necesario que se preste más atención a estos pasos. “El primero es ser muy cuidadosos con la forma en la que se tratan estos desechos, con el fin de garantizar que todos cumplan con los pasos para su correcta disposición”, dijo.

Recordó que Veracruz cuenta con un sistema de 28 rellenos sanitarios, de los cuales no todos cuentan con la normatividad necesaria para evitar algún tipo de contaminación. El caso agrava, dijo, si se considera que en la entidad hay también una red de más de mil 600 tiraderos ilegales que no cuentan con ningún tipo de requisito para la disposición final de desechos, pero que operan bajo el amparo de la impunidad.

Nuestro miedo es que esos desechos vayan a parar a tiraderos ilegales. La diferencia entre un relleno y un tiradero es que en el primero se cuenta con una membrana geopermeable que no permite filtración de los lixiviados al subsuelo y eso hace que cualquier agente contaminante, como en este caso el virus, pueda filtrarse. Además, el proceso de descomposición en los rellenos hace que la temperatura se eleve y eso puede provocar que el virus tenga menos oportunidad de vivir. Por eso la ventaja es depositarlos en los sitios específicos”, dijo.

Foto: Jaime Ramírez | El Sol de Córdoba

El biólogo señaló que aunque la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (PMA) esté clausurando estos tiraderos, es necesario que la Semarnat y Profepa vigilen a las empresas que manejan este tipo de residuos y que la Secretaría de Medio Ambiente del Estado (Sedema) ponga mayor atención a esa problemática. “Pido públicamente a la Sedema porque inexplicablemente se ha negado la creación de nuevos rellenos sanitarios, que sin ser la panacea al respecto, sí son más seguros”, indicó.

EL MANEJO EN CASAS

El plan de atención de la emergencia sanitaria por Covid-19 de las autoridades mexicanas contempla que aquellos pacientes no graves pasen el periodo de enfermedad en sus hogares. Este escenario apunta que más del 80% de los residuos que generarán las personas contagiadas por Covid-19 vayan a parar a botes de basura domésticos, que a su vez irán a un mismo contenedor de basura y a rellenos o tiraderos de basura. “Sabemos que en los hospitales hay protocolos específicos de desechos y la clasificación de éstos, pero ¿qué va a pasar en las casas? Esto es algo que ya se tiene que empezar a planear antes de que sea muy tarde”, indicó el biólogo.

Recordó que la basura doméstica es desechada a través de bolsas negras regulares o en contenedores en los que la basura se combina entre sí y en la gran mayoría de los casos no cuentan con cierres herméticos, por lo que se corre el riesgo de que antes de llegar a los sitios de disposición final el virus pueda “irse esparciendo”. “Los objetos o materiales que están impregnados con coronavirus quedan expuestos, poniendo en riesgo de contagio primero al personal de Limpia Pública, pero también a la sociedad en general y a aquellas personas que viven de la selección de la basura a través de la pepena”, añade.

El coordinador de la Iniciativa Ciudadana Ambiental Veracruz expuso que en este caso es la autoridad municipal la que debe coordinar un plan en el que se involucre a empresas que son especialistas en el manejo de los residuos infecciosos para que se hagan cargo y asegurarse que vayan a parar al sitio adecuado. “Eso va a requerir mucho compromiso de las autoridades veracruzanas para que se trate el tema, porque la mayor parte de los residuos infecciosos que se van a generar son a nivel domiciliario, desde casa y va a ir a parar a esas bolsas comunes”, precisó.

Cabe mencionar que de acuerdo con los estudios que se han hecho en torno al coronavirus causante del Covid-19, el virus permanece activo en aerosoles, cobre, cartón, acero inoxidable y plástico hasta en tres, cuatro, 24, 48 y 72 horas, respectivamente.

Finalmente, el biólogo destacó que no todas son malas noticias, ya que la pandemia de Covid-19 que se está enfrentando en el mundo ha logrado que la calidad del aire mejore y que la emisión de gases de efecto invernadero se reduzca a niveles que no habían logrado ni los propios tratados internacionales, “lo que genera gran alivio sobre el medio ambiente mundial”. Destacó que la pandemia ha forzado a la especie humana a pasmar sus actividades económicas más contaminantes y a reducir en grado superlativo el tráfico marítimo, aéreo y terrestre en todo el mundo.

Foto: Jaime Ramírez | El Sol de Córdoba

Un minúsculo ente que sólo puede verse ante un potente microscopio electrónico, y que sólo logra replicarse en tejido vivo, ha puesto de rodillas a la humanidad. Ojalá que cuando esto acabe, intensifiquemos nuestros esfuerzos en materia de salud pública y medio ambiente, concretando alianzas y acuerdos en los hechos”, concluyó.