Córdoba, Ver.- Cuando se tiene una pérdida ya sea de un familiar, una pareja, o una mascota se vive un proceso de duelo en el que las personas deben afrontar esta pérdida, pero existen épocas en donde este proceso se ve afectado o beneficiado dependiendo de las fechas, por ejemplo en Día de Muertos y Navidad en donde los recuerdos y el ambiente influye mucho en esta capacidad del doliente para sobrellevar este momento.
Itzel Lissanca Arizmendi Lima, psicoanalista, tanatóloga y experta en salud pública, explica el porqué el ritual mexicano, y que también se vive en otras culturas sobre el Día de Muertos, es un aliado para que las personas afronten de mejor manera el duelo ante esta pérdida.
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“Al hacer las ofrendas, poner la silla vacía y hablar con el muerto nos consuela, los rituales ayudan a llevar de manera más fácil el duelo por que eso da consuelo, al recordarlo, hacerle una carta, una canción, un álbum de fotos, son cosas que yo recomiendo, acompañar a los vivos y honrar la memoria de los muertos”, afirma.
En los meses pasados cuando el Covid-19 le quitó la vida a tantas personas, afectó de gran manera el proceso del duelo porque era precisamente la falta de despedirse, al no volver a ver a los familiares provocaba este tipo de shock en los familiares.
Pero existen distintos tipos de duelos en el que en algunos casos terminan en depresión, que al pasar del tiempo se reflejan en pensamientos suicidas, ansiedad, angustia, dejan de comer, llegan a tener pérdidas sociales, económicas y se considera un duelo patológico.
El duelo debe de pasarse de manera natural en sus cinco etapas que son negación, ira, negociación, depresión y aceptación, que no precisamente deben pasar en ese órden explica la tanatóloga pero es importante que se acuda a terapia para estos procesos.
¿Cuáles son los sentimientos en el fin de año?
La especialista comenta que es en noviembre cuando hay menos conflicto porque este duelo se vive, pero en diciembre es cuando hay mayor problema porque la gente siente culpa de sentir alegría cuando la persona ya no está, al no haber un ritual hacia la muerte y ser un ritual festivo esto afecta principalmente a las personas en duelo.
“El problema llega después de día de muertos porque mucha gente se siente culpable al sentir alegría cuando alguien ya no está, sienten culpa de volver a disfrutar la vida, nosotros promovemos que disfruten como si la persona estuviera ahí, desde la aceptación que aunque la persona ya no está en físico está ahí, porque mientras más lo reprimimos es más seguro que nos haga daño”, afirma.
Sugiere que para estas fechas decembrinas poner una silla y en lugar de olvidarlo o hacer como que ya no está, sentir como que si está y hacerlo parte de esta cena o fecha.
La depresión es algo muy importante a tomar en cuenta y que se debe estar alertas, “se debe prestar atención a síntomas que pueden ser depresión o ansiedad para que sea tratado oportunamente, procurar que no se aíslen y apoyarlos desde el amor y la paciencia”, explica Arizmendi Luna.
Para no caer en depresión y ayudar a las personas que viven un duelo se debe fortalecer el lazo social, no quedarse encerrado en el dolor y sufrimiento, recordar que la vida no es simple, no es ideal tiene muchas circunstancias que se deben afrontar con prácticas de autocuidado y buenas relaciones, pero principalmente ir a terapia y hablar con alguien sobre lo que se siente.