Xalapa, Ver.-Se llama Jane, tiene 22 años y es transexual. Su presencia en el lugar donde vende jugos de naranja no pasa desapercibida. Podría decirse que es inevitable no voltear a verla. Su larga cabellera y su silueta delineada van acorde con su vestimenta compuesta por un par de botas mineras color beige, una blusa multicolor y short de mezclilla despintado, que apenas cubre sus partes íntimas y muestra caderas y piernas torneadas.
Jane Cortés, quien tiene una altura de aproximadamente 1.80, aprovecha el rojo del semáforo para vender jugos. Sabe que debe acelerar porque del rojo al verde no hay espacio ni para soñar. Se pasea por el camellón de la avenida Villahermosa. En sus manos porta dos vasos desechables con el líquido amarillo. Durante la venta de sus jugos es común que propios y extraños la miren.
Jane reconoce que todavía en nuestra actualidad existe gente que agrede a personas que como ella definieron su sexualidad. “Hay mucha discriminación hacia nosotras, hacia nuestro género, los homosexuales”, dijo.
Afortunadamente no ha sido violentada, pero sabe que por allí andan deambulando personas que no las aceptan. “No, pero sí hay uno que otro que es homofóbico y te quiere golpear”, agregó.
Nuestra entrevistada recordó que a corta edad comenzó su transformación. “Desde que iba al kínder, me sentía atrapada en un cuerpo que no era correspondido, a los 14 me declaré homosexual y a los 18 transgénero”, expuso.
Lamentó que hoy día haya gente que los agreda. “La gente no entiende, hay mucha desinformación, mucho tabú, nos toman como sexoservidores, pero podemos laborar en un trabajo honrado, aunque desgraciadamente no hay oportunidades”, señaló.
Antes de despedirse, Jane Cortés posó para la cámara y dijo de manera categórica: “Me siento muy mujer” y luego continuó con su labor, perdiéndose entre los vehículos que se detienen en el semáforo, mientras algunos automovilistas la miraban con admiración y respeto.
Vida normal, pero con Respeto
Augusto Pilar García comenta que si existe discriminación es porque la gente se espanta. "Hay personas así que no aceptan sus errores, sus cosas, yo por qué me voy a hacer guaje si lo soy, hay que vivir la vida normal, pero con respeto”.
Augusto Pilar, nacido en Playa Vicente hace 60 años, se dedica hoy a la venta de flores en la avenida Murillo Vidal, aunque desde muy chico ha trabajado en cuestiones domésticas. Recuerda que fue desde muy niño cuando descubrió su preferencias hacia el mismo sexo.
“Desde que tenía 11 años, me han gustado los chamacos, no tiene nada de malo, es algo normal, algo que uno desea y cuando cae la presa, pues bien”, añadió. Dijo que no ha tenido problemas con la gente por sus preferencias sexuales. “No, porque si me buscan me encuentran, porque soy bueno a la buena, pero a la mala soy mala, porque lo gay lo llevo en otro lado”, finalizó.
PINTARON el ARCO IRIS
Carlos Carlos Suárez, del Centro Colectivo por los derechos humanos de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual e Intersexuales (LGBTI), dio a conocer que la pinta de un arco iris en el paso peatonal de la calle Enríquez se llevó a cabo con el consentimiento de las autoridades municipales. “Es una acción afirmativa que se cabildeó con el Ayuntamiento para poder hacerla efectiva, representa un avance significativo en la visibilización de las poblaciones LGBTI en la capital del estado”.
“Sabemos que no es del gusto de muchas personas el hecho que se haya pintado el paso peatonal, pero es importante recordar que la visibilización y afectividad de los derechos humanos de las personas están garantizadas dentro de la constitución política nacional y en la Constitución Política del Estado de Veracruz”, refirió.
Dijo que hay desconocimiento por parte de la gente. “Lo que pasa que es una falta de conocimiento y a la vez ignorancia. El hecho que se haya pintado el paso peatonal no quiere decir que la gente se va a convertir en homosexual, en lesbiana, en transexual, no, es simplemente un arco iris que representa a esta población que históricamente ha sido vulnerada, que históricamente no se le han respetado sus derechos”.
Este año tenían programada una marcha por las calles de la ciudad, pero debido a la pandemia por el Covid-19 la cancelaron, aunque Carlos Suárez anunció que se realizará el 19 de junio de 2021.