Orizaba, Ver.- Arte figurativo con influencia de realismo mágico y arte naif es lo que presenta la artista plástica Rosario Guarneros en su exposición “Mundos Interiores” en la Galería del Teatro Ignacio de la Llave. La obra está compuesta por 24 pinturas hechas con diferentes técnicas refleja sus recuerdos y sentimientos.
Mientras recorre el espacio donde ubicó estratégicamente cada una de sus obras, la artista originaria de Ciudad Mendoza recuerda que en su juventud, mientras estudiaba en la Ciudad de México, comenzó a tener influencia de los maestros impresionistas y expresionistas y lo plasmó en su obra.
“Vendí algunas pinturas de impresionismo. Expuse en algunos lugares importantes como el Palacio de Minería en México, en el Museo Carrillo Gil y di, en el Museo de Arte Moderno, un curso de verano para niños”, recuerda.
Años más tarde se casó, tuvo a mi hija y dejó un rato la pintura pues tuvo que hacer de padre y madre, tras la muerte de su esposo. Hace aproximadamente seis años retomó nuevamente la puntura, que varió un poco.
“Ahora lo que pinto es arte figurativo, tiene influencia de realismo mágico y algo de arte infantil (naif)”, dijo. La mayoría de sus pinturas se basa en hechos, recuerdos, sentimientos; los rostros que pinta son la mayoría, de niñas y ángeles; “supongo que es algo mío, empecé a crear ojos grandes, con mirada de ángel”, explicó.
“En mi casa hay dibujos pequeños, cuadros; estoy trabajando mucho en acrílico, tintas, dibujos y me gusta experimentar con varias cosas que desechan como papeles, latas que se van a la basura, lo que ya no sirve; a veces invento y lo acomodo y hago arte objeto”, señaló.
En la Galería del Teatro Llave se exhiben actualmente alrededor de 24 obras de varias técnicas, dibujo, las tintas, acuarelas, grabado; algunos óleos; cuerpos y caras de papel maché e incluso arte objeto. La idea, subrayó, es hacer algo diferente, original.
Rosario Guarneros es una artista independiente, pero se reúne con otros artistas, cada quien tiene su taller “y cuando nos ponemos de acuerdo nos reunimos para alguna exposición como la que tendremos en agosto en el Poliforum Mier y Pesado”, revela.
Los fines de semana se une a otro grupo “Siqueiros”, que se reúne en el Callejón del Arte. Ahí expone obras más pequeñas a la venta y menciona que aunque no son muchas las ventas, disfruta el ambiente y la plática con los demás pintores.
En el grupo del callejón hay de todo, pero la mayoría es arte comercial: paisajes, retratos, bodegones; “yo respeto a todos pero lo que yo hago es diferente, se sale un poquito de lo que hacen ellos y aunque hay algunas cosas en las que no estamos de acuerdo trato de participar para que haya más unión, más convivencia, más apoyo y confiamos en que se mantenga este grupo durante mucho tiempo”, expresa.
ARTE COMERCIAL, LO QUE MÁS ATRAE A LA GENTE
Señala que lo que más vende es el arte comercial. “Lo que es diferente, original poca gente lo comprende, por lo tanto se puede decir que cuando no se comprende no gusta, llama la atención pero no es lo suficientemente fuerte para que lo compren”, dice y agrega que la gente debe interesarse más, investigar un poco más, para saber y comprender mejor.
Reconoce que esto es difícil porque las personas siempre están ocupadas trabajando o en otras actividades, pero, “si visitaran más museos sabrían más sobre las corrientes que en este momento están en auge y los museos podrían invertir para que conozcan las artes plásticas o incluso inscribirse en cursos de pintura, grabado, dibujo; hay que cultivarse más. Es difícil vivir del arte pero es bueno esforzarse y continuar buscando la forma de sobresalir”, concluyó.
La obra de Rosario Guarneros permanecerá expuesta en la Galería del Teatro Ignacio de la Llave hasta el 4 de junio próximo.