Fábrica de velas San Miguel, negocio familiar con más de 100 años

En esta época de Semana Santa sus clientes son los católicos pues aquí se elaboran los cirios pascuales y tienen de todos los tamaños y precios

Adriana Luna/El Sol de Córdoba

  · viernes 29 de marzo de 2024

Con el paso de los años, el avance de la tecnología y el desarrollo de la ciudad fueron desplazando poco a poco las velas, por lo que comenzó a enseñar a sus hijos a elaborar nuevas velas, con formas y aromas para diversificar la oferta. / Foto: Jaime Ramírez / El Sol de Córdoba

Córdoba, Ver.- La fábrica de velas artesanales San Miguel, tiene cien años de fundación y aquí elaboran los cirios pascuales de varias parroquias de Córdoba y la Región.

¿Qué es el cirio pascual?

De acuerdo al sacerdote, Andrés Julián Verónica de la parroquia de San Nicolás de Bari, el significado más importante del cirio pascual es recordar la victoria sobre la muerte de Jesucristo a través de la resurrección.

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La resurrección de Cristo es simbolizada por la luz, por el fuego nuevo, que ahuyenta las tinieblas de la muerte y resucita victorioso. La luz, elemento natural, se convierte en símbolo de vida, felicidad, alegría y esperanza.

Este símbolo de fe, es elaborado en esta fábrica de velas artesanales que se ubica en el Centro Histórico de la Ciudad, en el patio de la Estrella en la avenida 5 y calle 3.

¿Cómo inició la Fábrica de velas San Miguel?

Emmanuel López Lezama, director de esta microempresa refiere que es una herencia de su bisabuelo, han pasado cuatro generaciones pues llegó aquí su familia en 1921.

“Mi bisabuelo es de Soltepec, Puebla, él llegó aquí a Córdoba donde conoció a mi bisabuela y en aquellos años comenzó a fabricar las velas, todo empezó haciendo herramientas de madera con diferentes ganchos, fue con lo que empezó haciendo velas de baño”, cuenta.

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En aquellas fechas el negocio fue bien aceptado, pues aún no había energía eléctrica “y entonces él empezó a comercializarlas, se colgaba una garrocha con varias velas y así recorría la ciudad”.

Con el paso de los años, el avance de la tecnología y el desarrollo de la ciudad fueron desplazando poco a poco las velas, por lo que comenzó a enseñar a sus hijos a elaborar nuevas velas, con formas y aromas para diversificar la oferta.

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Fue así como el arte de elaborar velas pasó de Miguel López Pérez a sus hijos, quienes a su vez lo transmitieron a sus descendientes y así hasta llegar a la época de Emmanuel López Lezama, quien actualmente cuenta con una gran variedad de velas en formas, tamaños y aromas.

En esta época de Semana Santa sus clientes son los católicos pues aquí se elaboran los cirios pascuales y tienen de todos los tamaños y precios.

"Es una temporada de mucho trabajo para nosotros además por el turismo, estamos de 9 de la mañana a 7 de la noche de lunes a domingo, solo en estas vacaciones"

Esta semana lo que más venden son justamente estos cirios alrededor de los cuales hay muchas creencias.

"Viene una clienta que se le hace un cirio especial, dice que lo ocupa para orar por los enfermos con cáncer, se lleva por lo menos dos para todo el año" relata.

Los católicos saben que este cirio es consagrado el Sábado de Gloria y puede ser usado cuando se reza el rosario, en momentos de temor o incertidumbre, cuando se requiere de la ayuda de Dios y de los santos, cuando azota algún fenómeno meteorológico o, sencillamente, cuando se tiene alguna intención especial y requieren auxilio celestial.