Hacienda El Lencero llena de esplendor; pocos visitantes llegan a ella

Las haciendas fueron lugares fundamentales en la época colonial y hoy son considerados espacios históricos que recuerdan el desarrollo de la región de Xalapa

Karla Cancino

  · jueves 21 de febrero de 2019

La hacienda data de 1525, cuando el conquistador Juan Lencero recibió este sitio y construyó una posada para viajeros. | Fotografía: Eduardo Murillo

Xalapa, Ver.- Entrar en una hacienda como las que existen en la región capital es ingresar a un lugar en el que el tiempo ha dejado su huella, pero que en la mayoría de los casos, no ha borrado su esplendor.

Vicente Espino Jara, cronista de la ciudad de Xalapa, asegura que las haciendas fueron lugares fundamentales en la época colonial y hoy son considerados espacios históricos que recuerdan el desarrollo de la región de Xalapa. Detalló que en ellas se apoyaba la economía de la zona mediante cultivos como la caña de azúcar, el café o los árboles frutales, así como la cría de ganado.

Municipios como Emiliano Zapata, Coatepec y Xico aún conservan buena parte de estos espacios, cuyas ganancias económicas no sólo beneficiaron a sus dueños, sino que al paso del tiempo se desarrollaron en sus alrededores pueblos enteros que vivían del trabajo en estos puntos.

En 1842 el inmueble fue adquirido a Antonio López de Santa Anna quien mandó a decorar las habitaciones para él, su esposa.


Espino Jara reconoció que con el paso del tiempo la mayoría de las haciendas que se mantienen en pie se han ido deteriorando, por lo que es urgente que se creen las estrategias que permitan su rescate y conservación.

Precisó que en estados como Tlaxcala, Yucatán, Hidalgo o Estado de México las haciendas constituyen un eje central del turismo, mientras que en la región capital han sido desaprovechadas.

Así, mientras que haciendas como Pacho, Zimpizahua y Palzoquiapan pertenecen a particulares que las recibieron como herencias familiares, otras como El Lencero o La Orduña forman parte de las propiedades del gobierno estatal y administradas por asociaciones que las ocupan para fines culturales y educativos.

EL LENCERO, EN EL OLVIDO

Pese a que en éste se mantiene la esencia de las haciendas en el siglo XIX y posee amplias extensiones de terrenos para caminar y recorrer, el Museo Ex Hacienda El Lencero recibe cada vez menos visitantes.

Ubicada en el municipio de Emiliano Zapata, la exhacienda de El Lencero fue adquirida por el gobierno estatal en 1981 y abierta al público, cinco años más tarde, en 1986, como un museo que desde entonces es administrado por un patronato.

En este recinto costumbrista convergen la historia, naturaleza y arquitectura de un lugar que tuvo a Antonio López de Santa Anna como huésped más célebre.


En entrevista, Gabriel Galán Hernández, administrador del Museo, precisó que en los últimos años la afluencia disminuyó en más de 60% debido a factores como la escasa publicidad, el mal estado en el que se encontraba el camino, la inseguridad de la zona y la crisis económica de muchas familias.

Sin embargo, aseguró que también en las escuelas de la región se notó el desinterés por este lugar, ya que anteriormente se recibían camiones completos de estudiantes de todos los niveles educativos que llegaban atraídos por la historia de este espacio tan cercano a Xalapa.

“Nosotros hace unos ocho años recibíamos a miles de estudiantes no sólo del estado de Veracruz, sino de estados como Hidalgo y Puebla. Veíamos aquí los martes y viernes cinco o seis autobuses estacionados. Desgraciadamente el año pasado vinieron a lo mucho cuatro escuelas en todo el año”, lamentó.

El administrador indicó que el mayor riesgo que tiene la poca afluencia de personas es que llegue el día en el que el espacio no sea redituable económicamente como museo y se le asigne otro uso, ya que esto implicaría perder no sólo las fuentes de trabajo de 11 personas, sino también un espacio fundamental de enseñanza.

Cada área de la hacienda cuenta una parte de la historia del estado.

“No puedo dar cifras, pero te puedo decir que desde septiembre los ingresos que se obtienen de las entradas ya no alcanzan ni para pagar la nómina (…) La hacienda tiene muchos gastos que se están absorbiendo por parte del patronato”, dijo.

La historia de la exhacienda El Lencero data de 1525, cuando el conquistador Juan Lencero recibió este sitio y construyó una posada para viajeros que iban de la CDMX al puerto de Veracruz.

Con el tiempo fue cambiando de dueños, hasta 1842, cuando su entonces dueño, Juan Francisco Caraza y Zavalza, vendió este inmueble a Antonio López de Santa Anna por 42 mil pesos y es él quien manda a decorar las habitaciones para él, su esposa y una recámara conyugal.

Actualmente el Museo Ex Hacienda El Lencero abre de martes a domingo, en horario de 10 a 17 horas en invierno, y a 18 horas en verano, con un costo de 40 pesos por persona y tarifa preferente para niños, estudiantes y personas de la tercera edad.

Las ocho hectáreas que abarca la propiedad se dividen en tres edificios, capilla, jardines, lago, una parte de bosque y las salas abiertas al público poseen muebles y decoración que recuerdan a la época en que fue construido.

Cuenta además con objetos que se asemejan a la fecha en la cual López de Santa Anna se volvió dueño. “Para nosotros sería muy importante que nos siguiera visitando la gente, tenemos disponibles visitas guiadas para que la gente que venga, no sólo apoye a que se siga abriendo, sino que lo disfrute y aprenda”, concluyó.