Córdoba, Ver.- El incendio que se registra desde la noche del miércoles 10 de abril en el exbasurero de Cuitláhuac tendrá sin duda severas repercusiones ambientales, señala el biólogo Guillermo Montealegre, asesor ambiental.
No obstante, dice, se debe esperar a que el fuego esté controlado para iniciar los trabajos relacionados al estudio de medición del impacto ambiental que podrían derivar de este siniestro que lleva ya más de un día.
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Y es que asegura que en este espacio se concentran una gran cantidad de residuos altamente flamables que pueden generar combustión de manera fácil, más si no se tiene un buen manejo de los mismos.
Podría provocar afectaciones a la salud de los pobladores de la zona
“Que desafortunado porque este incendio se dio de forma natural porque ahí hay un sin fin de residuos que se han ido dedo componiendo con el paso del tiempo, se han ido mezclando y formando nuevos residuos, entonces es complejo”, dice.
Por lo que adelanta que de igual forma se tendrán repercusiones en cuestiones de salud para aquellas poblaciones asentadas a corta distancia del punto de incendio y cuyos pobladores deben tomar las previsiones necesarias.
Y precisa que se debe esperar a que el fuego sea sofocado para poder iniciar los trabajos para medir realmente el impacto ambiental que tendrá este siniestro tanto en el ambiente como a la población.
Aunque adelanta que será complicado poder controlar el fuego, por lo que lo más recomendable es taparlo con tierra para poder sofocar o por lo menos evitar que las llamas sigan avanzando y consumiendo más residuos.
“Es muy difícil hacer una dictaminación de cual va a ser el impacto, pero para eso se requieren equipos muy preciso, pero lo urgente ahora es que se logre sofocar este incendio, desafortunadamente en este tipo de espacios siempre el fuego continúa en la parte inferior”, precisa.
El especialista ambiental señala que es lamentable que este tipo de siniestros se registren en espacios donde se supone ya no hay nadie cerca, por lo que se deben tomar acciones preventivas y evitar que ponga en riesgo a la población.