Córdoba, Ver.- Karen Roxana y Gabriela son jóvenes con discapacidad visual y aunque su vida no ha sido fácil siguieron sus sueños y están logrando sus metas, ambas son alumnas de Fundación Roma y animan a los niños y jóvenes con su mismo problema visual a buscar lo que tanto han anhelado.
Gabriela Landeta Nolasco, tiene 25 años y desde hace unas semanas ha empezado a estudiar la carrera de Inclusión y Educación Especial en una universidad de la ciudad de Orizaba. Ella, pese a sufrir ceguera no se limita en sus sueños y lo demostró obteniendo la mejor calificación del examen de admisión lo que le valió una beca del 100 por ciento., “fueron 2 mil 110 preguntas de las cuales tuve todas buenas”.
Para Gaby, como es conocida por sus amigos, su independencia de movimiento empezó desde que pudo hacer uso de la computadora y del teléfono celular. Se sube a los camiones de pasaje por sí sola y ahora que se encuentra estudiando la universidad a la que acude 3 veces a la semana ,sin embargo espera poder obtener apoyo para quedarse en Orizaba pues parte de su carrera profesional son las prácticas que debe de empezar el próximo mes.
“He hablado con mis profesores y me entienden, por ello les digo que por distancia y de que no puedo quedarme ahí en la ciudad voy únicamente 3 veces a la semana, los demás días tomó clases en línea, pues gracias a la fundación se usar una computadora y el bastón guía así como el lenguaje braille”.
Orgullosa de sí misma y su logro profesional, alentó a los jóvenes a seguir sus sueños viendo que la discapacidad no es un obstáculo para lograr sueños, metas y propósitos pues lejos de ellos para ella fue un reto en la vida del cual está saliendo triunfadora.
Por otro lado, Karen Roxana Zepahua Hernández, tiene 12 años de edad y desde los 3 años ha empezado en competencias de atletismo corriendo desde 1 a 10 kilómetros, su mamá es su guía en las competencias y pese a que no tiene entrenador, siempre está respaldada por su familia.
“Mi mamá es mi guía pero ya no aguanta mi ritmo de carrera, sería bueno poder profesionalizarme y así lograr mi sueño de ser como Guevara, la discapacidad no es un limitante”.
Perteneciente a una familia de corredores y deportistas, esta joven ha logrado obtener alrededor de 147 medallas y diplomas de participación en diversas carreras no solo en la región, sino en estados como Veracruz puerto, Puebla y la Ciudad de México.
Con estas casetas débiles visuales obtienen dinero
Roxana se mostró emocionada durante la entrevista, ya que próximamente irá a la ciudad de Orizaba a competir en una carrera internacional de 10 kilómetros, “a mi abuelo le gustaba correr y le enseñó a mi mamá y a mis tías e incluso a primos más grandes que yo, en mi caso, mi mamá me prepara y aunque pertenezco a un club no tengo un entrenador”.
Aunque busca el apoyo de un profesional para seguir creciendo en este ámbito deportivo, su lucha constante sigue y su sueño de ser como la corredora mexicana Ana Gabriela Guevara la motivan día a día a pesar de su discapacidad visual a seguir adelante.
Estas dos jóvenes relataron un poco de su historia para mostrar que se puede salir adelante y lograr las metas pese a que se está viviendo una situación de salud con el Covid-19 que ha frenado muchos temas no solo económicos.