La Universidad Veracruzana (UV) ya prepara un regreso gradual y con protocolo para sus actividades presenciales, expone el rector de la UV, Martín Aguilar Sánchez, y aclara que se llevará a cabo de la manera más segura con el fin de garantizar la salud física y mental de toda la universidad. “Entendemos el momento complicado y lo estamos atendiendo. Queremos responder a los problemas de salud mental de toda la comunidad y tener un buen regreso que nos ayude a tener más tranquilidad”.
Al dirigirse a la comunidad universitaria, Aguilar Sánchez pide al estudiantado la confianza en su trabajo y garantiza que se va a seguir el plan de trabajo que propuso como aspirante al cargo. Dio a conocer que existe el compromiso de tener una universidad más inclusiva, comprometida con el desarrollo científico, académico y una rectoría lo más cercana posible.
Reconoce que el impacto de la pandemia del Covid-19 no le ha permitido llevar a cabo las reuniones que tenían proyectadas para el arranque de su rectorado, sin embargo, mantiene la atención a la distancia y a corto plazo llevará a cabo salidas a las cuatro regiones restantes “con todos los protocolos necesarios. Eso es lo que hemos estado haciendo y así seguiremos”.
ESTÉN TRANQUILOS, REGRESO A CLASES SERÁ SEGURO
En entrevista para Diario de Xalapa, expone que fueron las y los estudiantes quienes le manifestaron su intención de regresar a sus aulas. Esto a través de una encuesta que la universidad aplicó en días pasados en donde el 44 por ciento del estudiantado se pronunció a favor de las clases presenciales.
Fue en esta encuesta, explica Aguilar Sánchez, que se pudo conocer también que el 54 por ciento de los jóvenes de la UV ya habían recibido la primera dosis de su vacuna Covid-19, por lo que existen las condiciones para un regreso seguro.
“El 66% de los estudiantes contestó este sondeo; de ese 66%, el 44% está muy interesado y además tiene como necesidad regresar a clases presenciales. El otro porcentaje se dividió entre clases virtuales y clases híbridas. Esto nos está indicando el impacto que ha tenido la pandemia en las y los estudiantes de la universidad y que, a nivel de licenciatura, ya quieren regresar a clases”, dijo.
Sentado en la oficina que ocupa desde el pasado 1 de septiembre, Martín Aguilar Sánchez reconoce que tras el proceso de designación rectoral y el protocolo de toma de protesta, él y su equipo se han abocado en poner en marcha su plan de trabajo. Una de estas prioridades, destaca, tiene que ver con el regreso a clases.
Reconoce que se trata de un proyecto sumamente complejo y que, aunque su antecesora ya había adelantado una parte del protocolo, hace falta trabajar en muchos detalles.
Se trata, dijo, de garantizar que el estudiantado pueda recibir educación de calidad, pero también que puedan recuperar un poco de las relaciones sociales alrededor del espacio del aula y de la universidad y disminuir parte del impacto en la salud mental que ha dejado la pandemia. “Estamos pensando en las y los estudiantes, pero también en el resto de la comunidad universitaria, académicos y personal administrativo”.
AULAS SEGURAS Y EQUIPADAS PARA EL REGRESO
A un año y medio del decreto de la emergencia sanitaria del Covid-19 en la entidad y con ello la suspensión de clases presenciales en la Universidad Veracruzana, la deserción escolar ha aumentado, explica el rector. Indica que aunque no existen datos detallados, se sabe que al menos el 15 por ciento de los estudiantes tuvieron que abandonar la institución ya sea de manera temporal o definitiva debido a las dificultades que implicó la pandemia.
Explica que dentro de este porcentaje hay jóvenes que se dieron de baja durante uno o dos semestres y que han estado regresando; otros que pidieron la baja temporal porque planean regresar cuando se retome la presencialidad.
Sin embargo, destaca que hay un tercer grupo que tuvo que abandonar sus estudios debido a que el Covid-19 le impactó de manera directa, ya sea por enfermedad o fallecimiento de algún miembro de la familia y esto implicó necesidades laborales. Es a ellos a los que se buscará apoyar en mayor medida. “Son todas esas combinaciones, bajas temporales y bajas definitivas. Ya estamos valorando todo esto y nuestro interés es que se vayan reincorporando”, dijo.
Dio a conocer que uno de los proyectos a corto plazo para apoyar a la comunidad estudiantil es el establecimiento en las cinco regiones de la UV de 400 aulas híbridas equipadas, con lo que se buscará resolver el problema de conectividad que tuvieron algunos estudiantes. Adelantó que estas aulas estarán listas antes de que termine el 2021. “Ya tenemos el recurso para ello; serán 400 en un trayecto de lo que resta del año para tener el equipamiento adecuado, porque recordemos que uno de los problemas que ha habido con el impacto de la pandemia, fue que había muchos chicos y jóvenes que no tenían a veces el proceso de conectividad”.
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Martín Aguilar reconoce que el regreso a clases presenciales incluye también un programa de adecuación de aulas, talleres y espacios universitarios a fin de que sean seguros. Además, dijo, se tienen que resolver algunos daños que existe en la infraestructura universitaria como resultado de la falta de clases y del impacto de fenómenos meteorológicos.
Y es que, aclara, aunque no hubo abandono de la Universidad, sí se dejaron de utilizar la mayoría de las instalaciones lo que ha traído consigo impactos negativos que deben ser resueltos antes del retorno de las y los estudiantes.
“No han sido abandonadas las aulas, más bien no han sido utilizadas. Entonces estamos atendiendo todas esas condiciones que requieren las aulas para que estén adecuadas. Hasta donde lo que yo he revisado, en general están en buenas condiciones, el problema que teníamos eran los impactos que habíamos tenido con el huracán, pero eso ya se están atendiendo los lugares y los impactos que tuvimos”, indica.
PRIMERAS ACCIONES COMO RECTOR
En días pasados, Aguilar Sánchez llevó a cabo la reducción del 40 por ciento de las compensaciones que recibe por este cargo y el 20 por ciento de los funcionarios de alto nivel. En entrevista reconoce que esta disminución no impacta al salario que recibe como rector sino al recurso extra que recibe como concepto de compensaciones. “No estamos haciendo el recorte en relación al salario, porque esas son condiciones laborales que están protegidas y nos meteríamos en un problema de carácter laboral, pero sí a las compensaciones”, dijo.
Detalla que en total la reducción autorizada implica un ahorro mensual a la institución de aproximadamente 24 mil pesos que “aunque no es mucho”, sí será invertido en otras necesidades de la UV. Además, aclara que con esto se envía un mensaje a las y los nuevos funcionarios que se están incorporando y sepan que la UV está regida bajo un nuevo plan de austeridad.
El rector precisa además que la Universidad Veracruzana cuenta con el presupuesto necesario no sólo para el establecimiento de las aulas híbridas sino para hacerle frente a todas las necesidades que implica el protocolo de regreso a clases. “La seguridad, el regreso gradual a clases con los cuidados necesarios, el gel, todo este tipo de apoyos. No tenemos ningún problema y eso nos ayuda mucho para estar con toda la tranquilidad y seguridad de llevarlo a cabo”.
Tras asumir el cargo, el nuevo rector se reunió de manera formal con el gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez y días después hizo lo propio con el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz, Hugo Gutiérrez Maldonado. Sobre estas reuniones, dio a conocer que se llevaron a cabo de manera respetuosa y con el fin de reiterar la coordinación que hay entre el gobierno y la UV.
De manera específica, explica el rector, la plática con el gobernador transcurrió a manera de presentación de los dos funcionarios y en ella se reiteró el interés de ambas partes de mantener una relación responsable y respetuosa. “El gobernador me planteó mucho el respeto a la autonomía de la universidad, yo destaqué la necesidad de que la universidad respondiera también a las problemáticas sociales que tiene el Estado y aquellos elementos donde pudiéramos coadyuvar a la resolución de problemáticas. Fue una conversación muy cordial y muy respetuosa entre el gobernador y yo”.
Por su parte, la reunión con la SSP tuvo que ver con la relación histórica que la UV tiene con esa institución para llevar a cabo el cuidado de los alrededores de las instalaciones universitarias. Reconoció que aunque actualmente no hay un regreso a clases masivo, sí está la UV y su comunidad activa y están teniendo actividades en diversos espacios universitarios. “Queremos tener una buena relación que nos permita la protección y la atención tanto al estudiantado como a la comunidad UV. Estamos atentos para que en los entornos pudiéramos tener mejores márgenes de atención y seguridad”.
Sobre la decisión tomada por la UV de rescindir el contrato de un académico que realizó comentarios misóginos y homofóbicos durante una de sus clases en línea, el rector expone que tras este hecho se buscará que las acciones de la institución en este tema sean más preventivas y menos punitivas.
“Vamos a hacer todo el esfuerzo de que estos estos casos sean lo menos posibles y que el impacto preventivo tenga repercusiones favorables. La meta es que tengamos la adecuada difusión sobre la importancia de integrar una cultura de paz, de equidad de género y libre de violencias y que todos sepamos que, independientemente de nuestra concepción y nuestras ideas, esta es una universidad laica y en la que se reconoce la visión enriquecedora en torno a la relación entre hombres y mujeres”, confirma.