Orizaba, Ver.- Las jarcierías donde se veden productos como fibras, cuerda para tendedero, escobas, cepillos, coladeras, palitas de madera para la cocina y demás, están en peligro de extinción, pues su competencia son los comerciantes que recorren las calles de la ciudad con esos productos, en triciclos.
Este tipo de negocios se encuentran en la periferia de los mercados, a donde las amas de casa llegan en busca de productos para el hogar.
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Emilio Sandoval, a sus sesenta años recuerda que iba con su abuela Juanita, a la jarciería, por cuerdas de “ixtle”, bolsas, costales, petates e hilo de henequén.
“Veía cómo las personas de los municipios vecinos compraban implementos para el arreo de las bestias de carga, como las cinchas burreras y muleras, que son tejidos o cintas anchas de henequén con unas lanzaderas en ambos extremos, para apretar la montura”, relata.
Dice que vivía en un patio de vecindad del barrio de la Alameda y su abuela compraba un tapete conocido como petate, para dormir; ese era el colchón de la familia.
¿Por qué las pocas jarcierías que quedan en Orizaba están en peligro de desaparecer?
Hoy, los vendedores ambulantes visitan los barrios y colonias para comercializar lo que venden las jarcierías como por ejemplo cepillos, escobetas, escobas de fibras naturales y más.
En los triciclos venden: tortilleros, mechudos, plumeros, jaulas de carrizo y de metal, cepillos de cerda sintética y artículos de madera como molinillos, rodillos, cucharas salseras, tablitas para picar alimentos y pinzas para tendedero.
Platica que la jarciería es una empresa netamente artesanal. Casi todo se hace a mano y, casi todo sale de las manos de los campesinos.
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“Construir una escobeta a mano, hacer un plumero, un anafre de lámina, un molinillo de madera, eso es una artesanía mexicana que está a punto de extinguirse por tanto producto chino bonito y barato, pero que en unos días ya se descompuso”, explica.
Dijo que para evitar que desaparezcan las jarcierías, es necesario que las familias le compren al comerciante que vende esos productos que son hechos por artesanos veracruzanos.
Nota publicada originalmente en El Sol de Orizaba