CÓRDOBA, Ver.- Las mujeres denominadas "Las Patronas" son el significado de lucha, esfuerzo y voluntad pues no se han limitado a ser grandes personas que ayudan a quienes más lo necesitan, sacan fuerzas de ellas mismas para poder dar aliento a los migrantes que las visitan, les dan fortaleza, comida, refugio y el que los vean partir les representa un dolor y tristeza pero siempre encomiendan a Dios su labor a las personas que conocen diariamente.
Norma Romero Vázquez, es la coordinadora de este grupo y desde hace tiempo atrás muestran a la región y fuera de la zona centro del estado el significado de una mujer fuerte que sin esperar nada a cambio hacen labor altruista y como toda mexicana ven como estirar lo económico, estas mujeres son destacadas y dignas de reconocer en el marco del Día Internacional de la Mujer.
La entrevistada reconoció la fuerza de la mujer migrante que llega hasta el albergue de las Patronas en Amatlán de los Reyes, "son ellas las que mantienen a su familia unida en el camino hasta su destino final, son ellas las que se pueden quitar el pan de la boca para darle a sus hijos".
Muchas veces les ha tocado ver a familias completas llegar hasta donde ellas y su objetivo es llegar todos a los Estados Unidos, pero otras más es ver a las mujeres solas con uno a dos hijos, sacando fuerzas desde adentro y pese al cansancio que pueda su cara reflejárseles, como buenas madres siempre tienen una sonrisa para sus hijos y con esto no mostrarles que todo les está complicando.
Al menos el 30 por ciento de los migrantes guatemaltecos y hondureños son mujeres que llegan con su familia o bien con sus hijos, "les digo que sigan sus sueños, nunca nada ha sido fácil, el camino es complicado y la mujer es quien más lo sufre e incluso en su trayecto si viaja sola puede ser abusada por como se quiera tomar y es lamentable y triste que eso pase".
Con más de 20 años de apoyo esta agrupación de mujeres se ha convertido en madre, guía, luz y esperanza para los migrantes en su paso por la comunidad de La Patrona en Amatlán y desde hace tiempo ven la forma de tener alimento y techo para los migrantes que pasan por sus terrenos.
Su labor altruista las ha llevado a obtener reconocimiento, visitas de personas fuera del estado que reconocen su trayectoria y labor, reportajes que muestran lo que realmente es ayudar sin necesidad de esperar recibir un dinero o pago pues para ellas, ver recuperado a un migrante o verles seguir su sueño, verlos sonreír, y levantarse oír un "gracias madre" con acentos en guatemaltecos, hondureños y nicaragüenses les da la fuerza e impulso para seguir con lo que llaman su proyecto de vida.
Este grupo de mujeres no solo sirve y ayuda a quienes llegan a su casa, sino a todo aquel que se aventura a subirse a la llamada "Bestia", pues este no tiene hora, por ello desde temprano se levantan para hacer arroz, un guiso y llenar de agua potable unas botellas que amarran con rafia para poder ser aventadas a los migrantes que pasan sobre el lomo de este tren.
Al oír el silbido de "La Bestia", con rejas, una sonrisa en sus rostros y su comida guisada con mucho amor, corren unos metros fuera del albergue pues es señal de que el tren está por pasar, quienes viajan saben y ubican a este grupo de mujeres y bajando aun con el tren en movimiento empiezan a estirar los brazos, mientras tanto las mujeres y voluntarios empiezan con cautela a arrojar la comida.
Norma Romero dijo que ellas son mujeres que saben lo que quieren y lo que quieren es ayudar, apoyar y servir a los hermanos migrantes, pues pese al Covid-19 no han cerrado el albergue ya que sabían que iban a necesitarlas y a casi un año de la pandemia y el ver como el flujo migratorio ha ido descendiendo, siguen con las rejas abiertas para que los migrantes puedan tener un lugar de descanso.
"A todas las mujeres migrantes les doy mi reconocimiento y aplauso pues no ha de ser fácil para ellas, deben de levantarse por sus hijos, por sus familia, por cumplir sus objetivos y lograr sus sueños, el hecho de que salieran de sus países de origen ya las hace fuertes".
La coordinadora de las patronas se unió a la conmemoración por el Día de la Mujer a sus compañeras, vecinas y amigas, a toda aquella mujer que no se "raja" y que día a día lucha para salir adelante en familia o sola, "no perdamos la fe y conservemos la esperanza, no debemos de vernos entre mujeres como rivales, sino como lo que somos y debemos de ayudarnos entre nosotras mismas pues sabemos lo que sacrificamos y vivimos".