Córdoba.- Nieto e hijo de maestros, Mario Luis Hernández Mendoza asegura que la docencia es una pasión que ha trascendido al menos tres generaciones de su familia, lo que lo hace sentirse orgulloso de ejercer una de las profesiones más nobles que puede existir.
En entrevista exclusiva para El Sol de Córdoba en el marco de la celebración del Día del Maestro, Mario Luis afirma que a lo largo de 24 años que lleva de maestro ha tenido experiencias que jamás olvidará y, sobre todo, no cambiaria por nada del mundo.
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“Yo vengo de una tradición familiar de maestros, mi abuelo fue maestro de la ESBAO, también fue maestro de primaria y encargado de la Supervisión Escolar, mi mamá también fue docente y ella me traía a algunas clases y verla cómo trabajaba con los niños me llamó la atención, fue así que también yo decidí ser docente” comenta.
Fue así como el 1 de enero de 1999 obtuvo su plaza, primero cubriendo un interinato en la escuela Guillermo A. Sherwell en Córdoba, posteriormente fue asignado a la primaria “Plan de Iguala” ubicada en la comunidad de Córdoba llamada Acayotla, de la que aún recuerda la clave: 30EPR060015M.
Detalla que aunque él y su hermana son los únicos que decidieron estudiar propiamente para ser docentes, tiene hermanos que de alguna u otra forma son maestros en nivel superior y otros más han ejercido la docencia en nivel medio superior dada a su experiencia.
“La docencia me gusta, cuando lo haces por amor, más allá del sueldo, es algo padre, a mi me encanta mi trabajo, siempre me vas a encontrar en la escuela, viendo que todo esté bien, cuando algo te gusta y te apasiona lo haces con gusto, desde abrir la escuela hasta checar que todo funcione bien” dice.
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Y señala que de poder volver el tiempo a cuando decidió ser maestro, sin duda volvería a elegir dicha profesión, pues aunque hay muchos retos también hay muchas satisfacciones que le han dejado un buen sabor de boca, pero sobre todo, lo han animado a seguir trabajando por el bien de las nuevas generaciones.
Ser docentes es enfrentarse a retos constantemente
Incluso reconoce que ser docente es enfrentarse constantemente a retos, pues la educación va cambiando constantemente con la evolución de las tecnologías de la información y es ahí donde el maestro debe prepararse para poder enseñar a los niños a través de mecanismos que para ellos sean fácil de entender.
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“Los tiempos han cambiado en los últimos años y la educación también lo ha hecho y es ahí donde debemos evolucionar y adaptarnos a fin de poder llevar a los niños toda esta enseñanza, debemos acoplarnos a lo que surge cada día, debemos actualizarnos a fin de ofrecer lo mejor a nuestros niños” relata y reconoce que la pandemia por Covid-19 obligó a los docentes a migra a una educación más digital.
Reconoce que aún hay retos que vencer, pero está seguro que con capacitación y en unidad con los maestros podrán llevar la educación de los niños a un buen puerto que les permita ser conscientes de todo lo que los rodea y sobre todo prepararlos para un futuro mejor.