VERACRUZ, Ver.- En medio de la pandemia por el Covid-19, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) atraviesa por su peor época con la falta de aire acondicionado en algunas de sus instalaciones, daños en sus inmuebles y desabasto de medicamentos.
Tan solo en la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) 14 de la clínica Adolfo Ruiz Cortines, el problema del aire acondicionado inició desde finales de marzo y la situación se agravó al grado que actualmente sólo hay clima en la planta baja, lo que es urgencias y el área de cocina.
El resto del edificio, que comprende seis pisos, no tiene aire acondicionado y tanto médicos como pacientes deben lidiar con el insoportable calor; el personal no tolera el equipo para su protección contra el Covid.
“Lo de los climas no tiene 15 días, tiene meses que se fueron descomponiendo, el cuarto piso estaba cerrado porque no servían los climas, pero ya es generalizado, en todos los pisos es la misma cosa, el calor es insoportable. Tenemos que usar equipo especializado para protegernos, pero con el calor que hace casi nos asamos, ya nos hemos quejado pero los directivos no hacen caso y por aquí acudimos a los medios pero hay represalias”, denunció uno de los enfermeros.
Asimismo, acusan que hay deficiencias en las instalaciones, ya que desde hace años no se ha llevado a cabo ninguna remodelación y algunas áreas ni siquiera tienen puertas, tienen filtraciones y eso acumula algunos bichos.
“No hay climas, no hay puertas, el virus anda por todos lados, no estamos seguros, las instalaciones no estaban preparadas para una emergencia de esta naturaleza, no ha habido programas de remodelación; hay mucha cucarachilla en algunas áreas”, agregó otro enfermero.
Asimismo, también se ha presentado el desabasto de medicamentos, como el profopol y la enoxoparina que son agentes necesarios para la inducción de la anestesia y se requieren para los pacientes del área de Covid-19 que requieren de la intubación.
Desde el inicio de la pandemia los trabajadores del IMSS han alzado la voz para pedir equipo especializado para poder atender a todos los pacientes que llegan infectados de coronavirus; sin embargo, lo que se les ha entregado no ha sido suficiente porque el número de enfermos crece día con día.
No obstante, y aunque cumplen con sus ocho horas de trabajo, la comida que reciben son puras tortas porque tampoco ya hay dinero para alimentarlos adecuadamente.
“Todas las guardias nos suben una bolsita que trae una torta, un jugo y una manzana o un plátano, es lo único que nos dan para cenar”, mencionó.