Córdoba, Ver.- Restaurantes, bares, cafeterías, zapaterías, cines son algunos de los giros comerciales que han abiertos paulatinamente desde que se emitió alerta naranja en la ciudad de Córdoba, sin embargo, salones de fiesta y banqueros siguen viéndose afectados pues son de los pocos que aún no levantan sus cortinas.
Armando Cueto Variz, dueño de Banquetes Cueto en Córdoba, expresó que la situación que ahora presenta su sector está al punto de la quiebra pues no han tenido respuesta por parte de las autoridades para reabrir sus locales.
“O nos dejan trabajar o trabajamos, en la región nuestros negocios son de cascadas económicas pues se ven afectados meseros, cocineras, floristas, fotógrafos, carnicerías y verdulerías”.
Pese a que la pandemia hizo que desde hace 7 meses cerraran sus cortinas, sus gastos de luz, renta y agua potable siguen corriendo pues son necesarios y que deben de hacer para no perder el lugar de empleo.
Cueto Variz refirió que han estado subsistiendo "endrogándose", es decir, vendiendo lo poco o mucho que llegan a tener en sus salones de fiestas o banquetes así como también entrar al rubro de la venta de comida a domicilio desde sus casas.
“Necesitamos de alguna forma reapertura todos nuestros negocios apegándose a los lineamientos de salud eso no es discutible, estamos comprometidos a respetar el tema de salud”, enfatizó.
Se supo que esta mañana un aproximado de 120 personas dueñas de salones de fiestas y banquetes, así como afectados indirectos, llegaron al Ayuntamiento de la Córdoba pidiendo un diálogo con las autoridades municipales, por lo que un grupo de personas entró a platicar con regidores y estos les comentaron que en la próxima sesión de cabildo tocarían el tema.
Cabe hacer mención que bares y cantinas, bajo el nuevo giro de Restaurante-Bar, han abierto sus puertas al público con las medidas de sanidad, limitación de gente y la venta de comida, siendo esta una prioridad para mantenerse activos.