Córdoba, Ver.- Se registran pocas visitas en el panteón municipal de Córdoba, se espera que por la tarde aumenten las visitas esto debido al clima elevado de la ciudad.
El panteón municipal es un recinto grande, una reja color negro, paredes de bloque gris pintadas por fuera de color negro y que en sus inmediaciones encierra muchas lágrimas derramadas, plegarias, suplicas, gritos, música y hasta risas.
Ciudadanos cordobeses se dan cita en el lugar para recordar con cariño a las mujeres que hace años les dieron la vida, a las mujeres que dejaron una huella en sus corazones y en la vida de cada uno de sus familiares.
Pese a que existía poca gente quienes estaban en el lugar eran testigos de risas y recuerdos.
A lo lejos el oído percibe canciones de todo género, balada, mariachi, guitarra, norteño, no importaba el género, está es la forma del humano de recordar a los seres que ya no están más en la tierra, un Día de las Madres para muchos llenos de nostalgia, otros de recuerdos y buenos momentos.
Familias conformadas por cuatro integrantes en su mayoría, entraban con sombrillas, lentes oscuros, botellas de agua en mano y flores de todos los colores y tamaños.
Rosas, gardenias, margaritas, claveles, petunias, nubes, lirios rojos y blancos, margaritas, arreglos florales grandes y pequeños, veladoras, globos con las leyendas “mamá te amo”, “eres mi todo” y “te extraño” adornaban los sepulcros de las madres fallecidas.
La celebración del Día de la Madre aún no termina y se espera que en transcurso de la tarde, cuando el calor haya descendido, sean más las familias que lleguen al panteón municipal a recordar de una manera diferente a las mamás que descansa en ese sitio.