Como resultado de la pandemia Covid-19, las actividades relacionadas con el narcotráfico en México han sufrido interrupciones, lo cual ha generado un incremento de la violencia derivado de la competencia en la obtención de recursos y control de rutas por parte de los grupos criminales; mientras que Veracruz y Puebla se ubican como los dos nuevos estados en la lista de violencia relacionada con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Lo anterior fue revelado por la organización estadounidense Armed Conflict Location & Even Data Project (ACLED) —dedicada al análisis, mapeos y escenarios de conflictos y crisis por eventos de violencia en el mundo— en el informe correspondiente al periodo 29 de marzo al 4 de abril de este año.
De acuerdo con la directora de investigación de ACLED, Roudabeh Kishi, “el mes pasado las muertes derivadas de la violencia relacionada con el CJNG se dispararon, y la actividad del grupo se expandió, involucrando la violencia en dos nuevos estados, Veracruz y Puebla, que habían estado libres de violencia del CJNG en 2020”.
Asimismo, agrega que los análisis apuntan hacia una tendencia “preocupante” en el aumento de la actividad del CJNG.
Por otra parte, señala, la violencia entre los cárteles ha aumentado en México, en la medida que éstos compiten por el acceso a recursos limitados, luego del cierre de fronteras en América Central. También explica que debido a la fragmentación de los cárteles y grupos criminales en el país, éstos dependen de una fuente de ingresos y operación en áreas específicas, lo cual significa que la interrupción de los mercados, los suministros y las rutas difíciles de “capear”, crean competencia.
La investigación realizada por ACLED también ubica al CJNG como el grupo más activo de México, que depende de precursores químicos de China para fabricar fentanilo. “Hubei (China) es específicamente un centro importante con su cadena de suministro interrumpida, por lo que el CJNG necesitará aumentar la competencia con otras pandillas criminales para mantener sus mercados y rutas de tráfico”, refirió. De acuerdo con la investigación presentada por la fundación Insight Crime, Investigación y Análisis del Crimen Organizado, desde que entró al mercado en 2013, el fentanilo se ha convertido en el tipo de opioide más letal en Estados Unidos: se estima que en 2017 en Estados Unidos murieron más de 47 mil personas por sobredosis con opioides.
“Mientras las empresas chinas producen la mayor parte del fentanilo, en México se está convirtiendo en un importante punto de tránsito y producción tanto de la droga como de sus análogos, y los traficantes mexicanos parecen estar desempeñando un papel importante en su distribución en Estados Unidos”, indica el reporte.
Además, menciona, “aunque el comercio de fentanilo en México parece estar dominado por dos organizaciones criminales (Cártel de Sinaloa y Cártel Jalisco Nueva Generación) requiere amplias redes de subcontratistas menores que se especializan en la importación, producción y transporte de drogas sintéticas”.
Tanto las organizaciones grandes como las pequeñas parecen estar aprovechando el aumento de la popularidad de la droga, que cada vez más es mezclada con otras sustancias como la cocaína, la metanfetamina y la marihuana, muy a menudo sin que el usuario final lo sepa. Según Insight Crime, en su reporte publicado en febrero de 2019, el gobierno de México todavía no percibía el fentanilo como un asunto importante y no había asignado recursos significativos para identificar a los principales promotores.
El consumo
Por su parte, la Secretaría de Salud (SS) y la Comisión Nacional sobre las Adicciones (CONADIC), en el Informe sobre la Situación del Consumo de Drogas en México y su Atención Integral 2019, reportó que en la venta de drogas al menudeo como la marihuana, cocaína, metanfetamina y heroína, en las cinco regiones geográficas del país (noroeste, noreste, centro, occidente y sureste) sobresale que la droga con mayor costo en las calles a nivel nacional es la cocaína al registrar un promedio de 141.50 pesos. Mientras que la metanfetamina se ubica en segundo lugar con un costo promedio de 104.67 pesos, seguida de la marihuana con valor aproximado de 79 pesos; y la droga más barata llega a ser la heroína con un valor de 37.50 pesos.
Según datos de la Dirección General de Información en Salud, de 2010 a 2017, en México se han registrado 22 mil 856 fallecimientos por trastornos mentales y del comportamiento debido al uso de distintas drogas, siendo 21 mil 920 defunciones por el consumo de alcohol, 179 por el tabaco y 757 por consumo de drogas ilícitas. En este periodo, el uso de inhalables representó la sustancia ilícita relacionada con un mayor número de muertes (115), seguido por los opiáceos (54), la cocaína (39) y por otro tipo de estimulantes (24).
Las drogas con un mínimo de muertes relacionadas con su consumo fueron los cannabinoides (6), alucinógenos (3) y los sedantes e hipnóticos, con dos decesos.