Xalapa, Ver.- Un recolector de hongos puede ganarse entre 3 y 4 mil pesos en temporada de alta de forma diaria, sin embargo, este oficio también pone en juego incluso la vida, pues algunos son venenosos, expresó el investigador del Instituto de Investigaciones Forestales de la Universidad Veracruzana (UV), Armando López.
El investigador manifestó que en la zona del Cofre de Perote hay alrededor de 400 personas dedicadas a esta actividad y es que los hongos crecen en la zona de la montaña de forma silvestre.
Armando López aseguró que hay personas que seis meses los dedican a recolectar los hongos y mucho de esto sirve para su dieta diaria, pero otra parte se destina a la venta en distintos municipios de la zona.
Entre los municipios que consumen este producto están Las Vigas, Perote, Acajete y Xalapa, que son lugares donde estos recolectores venden su producto a algunos negocios y en otras ocasiones lo ofertan de forma directa en los mercados locales.
La recolección de hongos, dijo, más que un oficio es algo que se ha heredado de generación en generación, pues se requiere necesariamente de un conocimiento para poder diferenciar los hongos comestibles de los hongos que son venenosos o alucinógenos y ese conocimiento incluso se ha transmitido a algunos de los investigadores.
Destacó que él como investigador lleva 30 años estudiando los hongos y recordó que esto era parte de las tradiciones prehispánicas.
Armando López insistió en que ese conocimiento de poder reconocer los hongos pasa de generación en generación e indicó que el consumo de las diversas especies es algo que les ha permitido obtener a las familias un ingreso adicional, pues incluso entre los más conocidos está el champiñón, pero también están las setas.
Expuso que son más de 200 especies de hongos silvestres los que crecen en la región del Cofre de Perote y algunos de ellos son comestibles, pero otros incluso son medicinales y crecen de forma abundante durante la temporada de lluvia.