Orizaba, Ver.- Con una serie de talleres que se relacionan con el arte de ser payaso, como risoterapia, pintacaritas y sobre cómo hacer utilería, cerca de un centenar de hombres, mujeres, jóvenes e incluso niños celebraron por adelantado el Día del Payaso en Orizaba. Por la tarde realizaron un desfile que salió del Poliforum Mier y Pesado y concluyó en el parque central, en el centro histórico.
Pastelín, organizador del Quinto Festival, reconoció que el trabajo de los payasos es importante, sobre todo porque la población necesita reír para aligerar el estrés que genera la situación económica actual y distraerse un poco de sus penas y problemas.
Acompañado de los payasos Gasparín, Catrín, Calcetín, Bodeguín y Bbto, quienes participaron en la coordinación del evento, señaló que no existe un padrón que permita saber cuántos payasos hay en la región, pero calculan que sean más de cien, desde los que apenas comienzan hasta los que ya tienen una trayectoria de 27 años, como es el caso de Bbto.
Sin embargo, apuntó que en su ámbito hay payasos camioneros, de calle, de fiestas, de circo; "tenemos compañeros que se suben a los autobuses y son muy buenos, porque es muy difícil hacer reír a los pasajeros porque van metidos en otra cosa, durmiendo, hablando por celular, escuchando música y ellos tienen que ver la forma para hacerlos reír".