CÓRDOBA, Ver.- Paramédicos de Cruz Roja de Córdoba piden a la Delegación de Bienestar en la ciudad entablar un diálogo con sus superiores a nivel estatal para que puedan ser acreedores a la vacuna anti-Covid-19, pues así como los doctores y enfermeras ellos también brindan atención prehospitalaria y como otros cuerpos de voluntariados corren el riesgo de contagios, expresó Héctor Solís Flores, coordinador de socorros de la Cruz Roja local.
Lamentó que no hayan sido tomados en cuenta para la vacunación en esta segunda etapa que comprende a los adultos mayores mayores de 60 en el estado, pese a que han tenido acercamiento con el Sector Salud, les mencionan que la instancia correcta para hacer peticiones de este tipo es la Secretaría de Bienestar a nivel estatal.
“Primero era necesario vacunar a todo el personal de primer nivel, como paramédicos, oficiales de policía, tránsito, rescatistas y bomberos, todas las corporaciones debían de haber ido con las personas de la tercera edad que son los más vulnerables pero siguen una línea de logística muy firme, donde no están dejando que alguien más se vacune”, recordó el coordinador.
Solís Flores recalcó que aún existen médicos, enfermeras y trabajadores de hospitales privados o bien de clínicas o seguros sociales que no se les ha puesto la primera dosis y eso también debe de ser contemplado antes de continuar con los demás sectores, pues comprende que todos tienen derecho a recibir la dosis.
Cuando fue la temporada de vacunación respecto a los adultos mayores en la ciudad de córdoba, el coordinador de socorros de Cruz Roja de Córdoba enfatizó que un compañero buscó la oportunidad de recibir la vacuna, pues está a meses de cumplir los 60 años, sin embargo le fue negado.
Sin molestia alguna mostró su apoyo con que el próximo sector a vacunarse sean los profesores del estado, pero hace el llamado y la petición a que también se contemple a los cuerpos voluntarios del estado, pues son aquellas personas que acuden a atender algún accidente, incendio o detención y no pueden saber que la persona a la que están procesando o ayudando es positiva, sospechosa o asintomática.
De la plantilla de 120 paramédicos voluntarios, solo está colaborando 40 a 50, pues el resto está en su casa resguardándose y en espera de la vacuna, al menos de la cantidad activa siete son personas que llegan a los 60 años y se espera que estos ya hayan sido vacunados en la campaña.
“Algunos me dicen que ya vacunaron a sus papás o abuelos, dentro de Cruz Roja tenemos maestros, ingenieros y contadores que no se dedican a la medicina, pero sí a la atención médica prehospitalaria a través de un servicio voluntario”, recordó.
Finalmente el entrevistado hizo un llamado a ser tomados en cuenta para las próximas campañas, pues su labor voluntaria continúa pese a estar ya a un año de la pandemia y aunque se protejan con los equipos especiales, también requieren de una protección a su sistema inmunológico.