Xalapa, Ver.- No haber cumplido con los propósitos de año nuevo, desempleo, falta de dinero, un mal estado de salud o la soltería son factores que para muchos generan depresión y que los lleva, incluso, a considerar acabar con su vida. Especialistas indican que la falta de luz solar o artificial por la temporada navideña influyen mucho en la depresión, pero también el entorno familiar juega un factor muy importante.
Diferentes estudios indican que las temporadas en que aumentan los casos de suicidio o intentos son cuando la luz solar es escasa, finales de otoño y principios de invierno. “Vivir en un ambiente de luz nos convierte en eso”, indicó el psicólogo clínico Ascención Capistrán Gutiérrez.
Algunos aseguran que los seres humanos somos mucho de lo que mediante la personalidad reflejamos, el estar en espacios aislados y de oscuridad fomentan el llamado trastorno afectivo estacional, lo que significa un aumento en la depresión de la gente, indicó.
En este sentido, existen varias alternativas para dar a los pacientes ese resplandor que muchas veces no reciben de forma natural. Una de ellas es la conocida terapia de luz, la cual consiste en exponer a la persona a una luz más brillante que la de interiores, pero no tan brillante como la luz solar directa. Esto ayuda a combatir la depresión, la descompensación horaria y los trastornos del sueño. Puede ayudar a hacer "volver a cero" su reloj biológico (ritmos circadianos), el cual controla el sueño y la vigilia.
Capistrán Gutiérrez agregó que para detectar alguna alteración emocional es necesario realizar al paciente varios exámenes clínicos para conocer los niveles de serotonina en el cerebro. Los niveles bajos de este neurotransmisor generan en las personas sentimientos negativos, tristeza, desconfianza, ataques de pánico, ansiedad, falta de apetito y hasta problemas de rendimiento sexual.
Con una criticada participación por la ausencia de funcionarios, especialistas y público en general, en octubre se realizó en el Congreso del Estado de Veracruz la Conmemoración del Día mundial de la salud mental 2019. En esta edición, el evento tuvo como tema principal los trabajos en materia de prevención de los suicidios.
Víctor Villanueva Hernández, psiquiatra infantil y de la adolescencia, comenta que con relación a la temporada navideña y los supuestos aumentos en los suicidios “sí hay una asociación estacional y en fechas importantes, eventos estresantes, pueden orillar a la gente a tomar una decisión fatal”.
Agregó que es de suma importancia saber diferenciar una conducta suicida contra un intento suicida, “ya que no siempre vienen acompañadas de un estado de depresión; hay múltiples suicidios que se hacen en contexto impulsivo”.
Refiere que una conducta así afecta más a los hombres solteros, de escasos recursos, pero aún más cuando se encuentran bajo efecto de psicotrópicos, incluidos el alcohol.
Los especialistas recomiendan a los padres de familia estar atentos del núcleo familiar, la conducta de los hijos y los cercanos a éstos influye de forma directa. Registros indican que es entre los 15 y 24 años de edad las edades en que aumentan los casos, sin embargo, se dan también en niños.
¿Cómo detectas una conducta suicida? “Principalmente en los adolescentes se refleja en el aislamiento, irritabilidad, tristeza, cambios repentinos en su conducta, el bajo desempeño académico (…) Pero siempre les digo que es muy bueno preguntar en cuanto se presente alguna de estas conductas”, indicó Villanueva Hernández.
Prevenir y buscar alternativas para salir de esos “muros” fueron los temas centrales del Día Mundial de la Salud Mental 2019. Ahí se trató de hacer puentes de comunicación con todas las personas, principalmente en el entorno familiar, “darse tiempo para un ‘cómo estás’ puede significar una gran diferencia”, indicó.
