Orizaba, Ver.- Orizaba cuna de la cerveza, así lo catalogan mucho ya que por décadas esta región se ha caracterizado por tener grandes fábricas que con la elaboración de este producto le ha dado trabajo a miles de orizabeños desde 1894 hasta la fecha.
Uno de esos jóvenes inquietos que a sus 24 años entró a trabajar en la Cervecería fue Alejandro Herrera Ávila quien por 20 años de 1980 hasta el 2000, entregó su esfuerzo día a día trabajar con la cebada y las enormes máquinas con las que el producto final era una deliciosa bebida que a muchos enamora.
Al dejar de laborar en la cervecería Alejandro entró en un empleo administrativo en CAEV en Río Blanco, pero algo dentro de él lo ligaba al aromático y maravilloso mundo de la cerveza por lo que decidió hacer su propio producto de manera artesanal.
“Un día fui al BeerFest aquí en Orizaba y había un curso de cerveza artesanal al cual entré por gusto, pero ahí recordé muchas cosas que había yo hecho cuando trabajaba en la Cervecería Cuahutemoc Moctezuma y fue entonces que dije porqué no? y aquí estamos a 5 años”, expresó Don Alejandro.
Todo inició de manera rústica y en casa con un equipo básico de 20 litros y hoy ya la elaboran con un equipo de 100 litros, en casa con la familia de manera artesanal, su esposa y su yerno Enrique Tapia son quienes ayudan en este proyecto que hoy ya es un ícono en la ciudad.
Al principio la primer cerveza Anahuac fue una Pale Ale que al ver que tenía cuerpo y sabía bastante bien los motivó a continuar y a la fecha elaboran ya 5 estilos de cerveza entre las que están:
La clara que es la Pale Ale, es una cerveza de un amargor moderado, de 5 grados de alcohol, de las que más gustan, otra clara es la de frutos rojos, y la de fresa, frambuesa y mora.
Entre las oscuras están una cerveza de color con aroma y sabor tenue a caramelo, otra Stout que es una cerveza negra “parece chapapote, amargor moderado pero que a ala gente le gusta mucho”, comenta Alejandro que la más reciente es una de trigo.
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Este día internacional de la cerveza, este trabajo 100% artesanal representa el trabajo de una familia orizabeña que abraza la tradición y el cariño que deja la elaboración de su Cerveza Anahuac.
“Usted toma una cerveza Anahuac y tiene cuerpo, con las cervezas artesanales se puede sentir el sabor como se hacían antes las cervezas hace 50 años en la región”, catadores de cervecerías internacionales comenta han venido a probar su cerveza artesanal y les ha gustado porque refleja como cuando cerveceros añejos la elaboraban hace muchos años.
“Como le digo a mis amigos las cervezas artesanales no son para emborracharse, son para degustarlas con una buena botana, al calor de la plática, degustarlas, olerlas, paladearlas, ver la espuma, el color y la transparencia de la cerveza”.
El maestro cervecero nos comenta las satisfacciones que le ha dejado hacer lo que por tantos años elaboró para otros, ahora lo hace con amor para su familia, su ciudad y para el mundo, pues su producto artesanal ya ha llegado hasta otros lugares como son Saltillo y Cancún.
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Hoy en día Orizaba no solo es conocida como la Cuna de la Cerveza, tiene entre sus festivales uno especial que se hace cada año en su honor el BeerFest Orizaba es uno de los más esperados por todos.
De igual forma en el Palacio de Hierro se encuentra en una de sus salas el Museo de la Cerveza en donde cuenta la historia desde aquellos años siendo un 1 de julio de 1896, cuando cerca de la estación del ferrocarril, comienza la historia de la “Cervecería Moctezuma, S.A. de C.V.”, una empresa que por muchos años ha dado trabajo a miles de personas de la región.