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a crisis económica generada por el Covid-19 podría generar que 10 millones de mexicanos se suman en la pobreza, debido a la falta de políticas sociales del Gobierno para apoyar a los sectores más vulnerables, advirtió el Consejo Nacional de Evaluación de Política de Desarrollo Social (Coneval).
“La pobreza por ingresos se podría incrementar entre 7.2 y 7.9 puntos porcentuales, con un incremento de la población en situación de pobreza extrema por ingresos entre 6.1 y 10.7 millones de personas para 2020, mientras que para la pobreza laboral se estima un aumento de 37.3 por ciento a 45.8 por ciento en el segundo trimestre del 2020”, concluye el análisis La política social en el contexto de la pandemia por el virus SARS-CoV2 (COVID-19) en México, elaborado por el Coneval.
En el estudio, se destaca que uno de los riesgos durante este periodo de crisis es la pérdida de empleo, no sólo porque eso impactará en los ingresos familiares, sino porque también se perderán las prestaciones sociales.
Ante este panorama, el Coneval advierte que el impacto de la crisis del Covid- 19 podría generar un retroceso de hasta una década en el combate a la pobreza, mismos que el mismo Consejo ha definido como insuficientes.
“La contingencia sanitaria internacional provocada por la enfermedad Covid- 19 en México puede revertir los avances en desarrollo social de la última década y comprometer la capacidad de recuperación económica de los hogares”, indica el análisis.
Coneval advierte también que los programas sociales desplegados por el Gobierno federal en esta crisis son insuficientes para atender a la población vulnerable, en especial los sectores de ingreso medio.
“Ninguno de los programas se dirige explícitamente a la población en situación de pobreza, de acuerdo con la medición del Coneval, aunque podría coincidir con la priorización territorial aplicada por varios de los programas. Hasta el momento ninguna acción está dirigida a la población que perdió su empleo a raíz de la emergencia sanitaria”. Otro de los sectores más vulnerables son las mujeres, quienes afrontan el escenario de la pandemia con desventaja. Citando números de la Cepal, el Coneval estima que las mujeres representan 72.8 por ciento del total de personas ocupadas en los sistemas de salud de la región.
Al respecto, Cepal señala que condiciones de trabajo son precarias, las cuales se vuelven extremas con el aumento de horas laborales y el riesgo existente de contagio de la Covid-19, además de los costos y esfuerzo de la participación de las mujeres en mayor proporción en las tareas de cuidado en casa y del trabajo doméstico es otro factor para considerarlas vulnerables.
Por eso, el Consejo indica que debe de haber una redirección de los recursos, que son escasos, para atender de la mejor manera a los sectores vulnerables, como por ejemplo quienes vayan a perder el empleo en medio de esta crisis.
“Enfrentar la crisis de manera reactiva y emergente no será suficiente, es necesario reducir las brechas existentes, identificar prioridades nacionales de información, investigación y formación de capital humano e iniciar una urgente reflexión pública sobre la necesidad de promover la inclusión y la construcción de un sistema universal de protección social”.
Para afrontar el reto, no sólo se requiere al Gobierno federal, sino que se requieren medidas coordinadas de los tres órdenes de gobierno para promover que los hogares que tendrán dificultades en el ingreso puedan atender las necesidades más básicas.
Aunque el Consejo destaca el valor de las transferencias directas a las personas en esta crisis, señala que la evidencia demuestra que esta medida debe ser temporal, por lo que el Gobierno federal debe de visualizar soluciones a más largo plazo.
“Es necesario recuperar una trayectoria de crecimiento económico incluyente e impulsar medidas de mediano y largo plazos imprescindibles para construir un sistema de protección social con enfoque de derechos sociales resiliente a eventos críticos o de crisis”, añade el análisis.
Por eso, Coneval recomienda ampliar el programa de créditos a las micro, pequeñas y medianas empresas, para proteger el empleo y de subsidios al empleo parcial o total de las cuotas obrero-patronales que los empleadores deben asumir durante los meses de confinamiento. “Se apoyaría a 43.8 por ciento de la población ocupada”.
Otros aspectos que el Coneval pide al Gobierno cuidar son: la alimentación y el sector salud. En el primer tema, llama a implementar la entrega de despensas a las familias de los menores que son beneficiados con la provisión de alimentos en las escuelas, en tanto las clases se encuentran suspendidas, además de garantizar la operación de Diconsa y Liconsa.
En materia de salud, exhorta a las autoridades a aumentar la disponibilidad de camas para hospitalización previendo el aumento en la demanda de estos servicios, y agilizar la contratación de profesionales de la salud.
El análisis también hace referencia al modelo de educación a distancia, mostrando como una preocupación el posible crecimiento de la brecha por la dificultad de implementarla en comunidades indígenas o con migrantes.
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