Calcahualco, Ver. – Autoridades regiomontanas confirmaron que dos de los seis fallecidos por un accidente ocurrido la tarde del sábado en la autopista Saltillo-avenida Morones Prieto del municipio de Santa Catarina, Nuevo León, eran de la comunidad La Mesa, en esta localidad.
Las víctimas del estado de Veracruz son Osvaldo N y Benedicto N, quienes fueron reconocidos por sus familiares.
Te podría interesar: Choque en Avenida 9 de Córdoba provoca cierre de circulación
Otras víctimas son Katy Juliet N, Misael N, Pedro N, además de Martín N, quienes eran de la zona.
Lesionados son los hermanos Raziel y Rubiel N, así como el supervisor de obra Gildardo, los cuales fueron valorados por lesiones menores y crisis nerviosa por los paramédicos de Protección Civil de Nuevo León, Santa Catarina, Cruz Roja, CRUM y Bomberos Nuevo León.
El accidente es investigado por el personal de fiscalía de justicia para determinar las probables causas del accidente y deslindar responsabilidades.
¿Qué se sabe sobre este accidente?
Las primeras hipótesis dadas a conocer por sobrevivientes del accidente a las autoridades policiacas y grupos de auxilio, señala que el operador de un tractocamión, el cual salió con lesiones leves y fue detenido, manejaba con probable velocidad inmoderada.
Síguenos a través de Google News
En el kilómetro 92 de la autopista Saltillo-avenida Morones Prieto, a la altura de la entrada al municipio de Santa Catarina, el chofer chocó con una camioneta pick up negra y fuera de control arrolló a los trabajadores que le daban mantenimiento a la vía de comunicación.
El tracto camión arrastró a su pasó a las víctimas y terminó desbaratado e incendiado en la cinta de asfalto por lo cual la circulación se cerró durante varias horas.
Lee más: Vuela camioneta del puente de la Quebradora en Córdoba
Vía 911 se reportó el percance a los grupos de auxilio, quienes llegaron y se coordinaron para controlar y sofocar el fuego, y luego encontrar los cuerpos, los cuales quedaron esparcidos a varios metros de distancia.
Finalmente, las autoridades ministeriales de ese lugar se encargaron de dar fe de los hechos y trasladaron los cuerpos a la morgue, en donde quedaron a disposición hasta que fueron identificados y reclamados por sus familiares.